Nos casamos hace un mes allí. El sitio en sí es precioso, tanto las áreas exteriores como los salones.Nos decantamos con mi mujer por esta opción, entre otras alternativas válidas, tras marcar algunas condiciones con el gestor de la hacienda. Eran condiciones para nosotros muy vinculantes y fuimos específicos antes de decidirnos e ingresar la paga y señal para poder reservar la fecha.Se aceptaron dichas condiciones.Cuando necesitamos que una de ellas se cumpliera, en un momento en que como cliente estás de lo más vulnerable y sin tiempo para buscar un plan B, se nos negó. La excusa es q ya no había tiempo, pero nunca se nos informó de que tuviéramos que pedirlo con un mínimo de antelación.

Acabamos teniendo que tragarnos nuestra frustración y descontento porqué quisimos disfrutar de nuestro día especial sin añadir más tensiones a las que ya acumulas inevitablemente con los preparativos.

Afortunadamente las empresas que contratamos nosotros para montar la boda en la hacienda nos respondieron maravillosamente y todo lo demás salió como queríamos.

Queremos avisar a cualquier futura pareja que quiera casarse en Hacienda Ballemari que deje por escrito y firmado cualquier condición específica que acordéis antes de reservar, porqué la palabra de quien gestiona la finca no es suficiente.

La falta de profesionalidad y sensibilidad quedó patente y si algo así me hubiera pasado en cualquier otro momento de mi vida, hubiera terminado inmediatamente con los servicios de esta empresa.