Son para siempre, por eso las fotografías de vuestra boda son tan importantes. El recuerdo de lo vivido, de las emocione del día. Con un trabajo personalizado, sencillo, detallista y atemporal estaré todo el día con vosotros para que no se escape el más mínimo detalle.
Mís fotografías buscan capturar la espontaneidad del momento, ser emotivas y transmitir la felicidad que os llenará en un momento tan único como irrepetible.
Cada boda es diferente, particular, única, como lo son las parejas, y por eso me dedico en cuerpo y alma a cada boda. No afronto ninguna de la misma manera, no encontraréis fotografías iguales. Este es mi objetivo desde el domicilio/hotel, hasta una hora después del primer baile estaré junto a vosotros para contar en fotografías vuestro días.
Cada instante debe ser inmortalizado y las fotos deben hablar por sí solas.