Hoy en día, es de lo más común compartir tu boda, o parte de ella, a través de las redes sociales, concretamente en Instagram. Pero, por mucha ilusión que te haga compartir tu boda y hacer a todos tus seguidores partícipes, no debes olvidar que no todo vale. Por eso, hoy te recordamos lo que sí y lo que no deberías compartir de tu boda en Instagram.
SÍ comparte algún preparativo. Es normal que quieras compartir cómo vas preparando con toda la ilusión uno de los días más bonitos. Puede compartir detalles, guiños incluso fotos de inspiración que te gusten.
NO desveles nada que no quieras que se sepa. Cuidado con que la emoción te pueda y publicar más de la cuenta. Por muy guapa que te veas en la prueba del vestido de novia o con esa trenza maravillosa que lucirás en tu boda. Reserva lo mejor para el día B.
SÍ crea un hashtag de boda. Parece obvio y puede que lo sea, pero un hashtag que englobe todo lo relacionado con vuestra boda será de utilidad para ti, para que, una vez que haya pasado todo puedas ver con tranquilidad todas las fotos de tus invitados. A ellos también les vendrá de maravilla para compartir sus selfies y las mejores fotos y vídeos. ¡Un recuerdo para siempre!
NO compartas aquellas fotos que quieras que sean sólo para vosotros. Es decir, ese abrazo especial con un padre, el momento en el que estéis solos los dos, o un mensaje especial que te escriba alguien también muy especial.
SÍ sube las risas con tus mejores amigas. Será un bonito recuerdo y luego podrás hacer un collage para imprimir y tenerlo en casa. Ellas son parte fundamental de tu boda y merecen un gran recuerdo.
NO subas fotos cuando el alcohol empieza a hacer efecto para no llevarte disgustos innecesarios al día siguiente… Si bebes, no utilices las redes.
SÍ comparte tu vestido de novia. Es el secreto mejor guardado pero llegado el momento hay que lucirlo y hacerte fotos bonitas, boomerangs, zoom de detalles y lo que haga falta para que ese vestido reciba los likes que se merece.
NO abuses. La línea entre interesar y cansar es muy fina. Es decir es mejor pasarse de menos que de más. Si resulta que haces casi una retransmisión en directo de tu boda, acabarás aburriendo a tus seguidores y puede que hasta los invitados se sientan algo apabullados.
SÍ publica detalles que a la gente le gusta ver. Pendientes, los zapatos, la corona del pelo, el ramo… Pequeños detalles que hacen todo un conjunto.
NO aburras publicando fotos de todos tus familiares, primos, sobrinos y primos segundos. Son tu familia y no tienen por qué protagonizar tu time line de Instagram.
SÍ y SÍ. Publica un beso, bonito, tierno, sentido… El que tú quieras pero que sea especial, con tu recién estrenado marido. El mejor broche de oro de tu fiesta y de tu InstaBoda.
NO abuses de las fotos en blanco y negro. Sabemos que muchas veces dan un plus de estilo pero si pones demasiadas hará el efecto contrario y parecerá que tu boda tiene connotaciones tristes.
SÍ da protagonismo al novio. Que no parezca que te estás casando sola. Hazle partícipe y aunque esté un poco reticente, luego le gustará verse junto a ti y pasándolo bien con los amigos.
NO busques la perfección ni el postureo. Estamos de acuerdo con que todos subimos las fotos más bonitas y en las que salimos bien. Pero tu boda no puede parecer algo posado o irreal, dale naturalidad y espontaneidad, te sentirás más a gusto, serás más tú misma y a la gente le gustará más…
Con estos consejos claros, tus redes están preparadas para vivir de cerca tu boda. Apúntalos y descubre las 20 cosas que no debes hacer en tu boda en la era digital o cómo tener una boda 2.0.
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