Se conocieron cuando apenas eran unos niños mientras jugaban en el parque pero no fue hasta el año 2001 cuando comenzaron una relación, aunque según Javi su amor fue a primera vista. Noelia finalmente acabó enamorada de él y confiesa que su marido es el regalo más maravilloso que la vida le ha dado.
Trece años después, la pareja tomó la decisión de casarse, sin la típica pedida de manos. Cuenta Noelia que ocurrió una tarde de cañas en la que comenzaron a imaginarse el día de su boda y a preguntarse ¿por qué no? Allí mismo pusieron la fecha: sería el 4 de julio de 2015. “Estábamos súper contentos e ilusionados, queríamos una boda donde se respirara luz, paz, amor y buen rollo… Por eso se nos ocurrió la idea de que fuera ibicenca”, confiesa la novia.
Como fotógrafo escogieron a Carlos Lucca, “una gran persona que se convirtió en poco tiempo en nuestro amigo. Nos encantaban sus reportajes, se veía en ellos reflejado el más profundo sentimiento de cada pareja y eso es lo que buscábamos para nuestras fotos de boda, imágenes con alma”.
Los novios
Para el gran día, Noelia escogió un vestido de novia de YolanCris que adquirió en Mamen González (Alicante) con el que estaba guapísima. Era un diseño desenfadado atado al cuello y con escote de pico que complementó con unas cuñas preciosas de Melani Lazaro y un ramo de novia de flores naturales y campestres de la Floristería Bea de Elda, al igual que la decoración floral de la celebración.
La Peluquería Caché fue la encargada del peinado y ella misma se maquilló, Noelia es esteticista y nadie mejor que ella para saber lo que mejor le sentaría el día más importante de su vida.
Por su parte, Javi lució un diseño de Lulu Novios en color blanco y unos zapatos de Calzados Duver en color camel. Los novios estaban radiantes y perfectos para vivir un momento tan especial como el de su ¡sí, quiero!
La ceremonia
El lugar de celebración fue Finca Jardín Los Rosales, Javi y Noelia querían estar rodeados de naturaleza y hermosas montañas, por lo que no pudieron tomar una decisión más acertada. Celebraron una “ceremonia de la luz”, donde colocaron tres velas que los novios debían encender con un texto que decía “que la luz ilumine nuestro camino y nuestros corazones”.
Fue una ceremonia diferente, íntima y muy emotiva, los novios querían que les acompañaran sus familiares y amigos más cercanos, aquellos que se alegraban de su boda tanto como ellos. En un escenario idílico intercambiaron las alianzas de plata, adquiridas en Manuel Joyero.
El banquete
El banquete fue todo un éxito, estuvo lleno de sorpresas que encantaron a todos los invitados. Las mesas estaban enumeradas en círculos de la paz que preparó la propia novia a los que diferenció con nombres como “happy flower”, “love”, “sun”… En cada lugar colocó como regalo para los invitados una maceta aromática con un mensaje personalizado.
Baile de los novios
Cuando terminó el banquete los novios dieron paso a la suelta de globos que tenían preparada donde cada invitado pidió un deseo y lo echó a volar en un precioso cielo que esa noche fue testigo del amor entre Noelia y Javi. ¡Enhorabuena pareja!
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