¿Ir o no ir a la boda de tu ex? Te contamos los pros y los contras

¿Ir o no ir a la boda de un ex? Esa es la cuestión. Por difícil que parezca, a veces al terminar una relación seguimos manteniendo contacto con la otra persona y quizá, incluso un cierto grado de amistad que puede llevar a situaciones a veces no muy cómodas. ¿Una de ellas? Que te invite a su boda.

Una vez que has recibido la invitación, algo que muchas veces te puede dejar de por sí más que sorprendida, se plantea el dilema ¿voy o no voy a la boda? Desde Zankyou te contamos los pros y los contras de una y otra decisión.

Si decides ir…

Pros

• Si la amistad es sincera te puede apetecer: Si realmente te llevas bien con tu ex y no es una amistad que realmente mantengas solo por compromiso, ir a su boda te hará ilusión y puede ser una ocasión para pasarlo bien con amigos comunes.
• Es la mejor manera de demostrar que lo has superado: Presentarte en la boda, con tus mejores galas, guapísima, sacándote todo el partido y, si tienes pareja, mejor que mejor; es la mejor manera de demostrar a todo el mundo que lo vuestro es agua pasada y que lo tienes completamente superado.

Contras

• El reencuentro con la familia de tu ex: Es una situación que, por mucho que la ruptura esté superada, no suele ser agradable. Ten en cuenta que su madre pudo haber sido tu suegra y que te expones a comentarios, puede que no siempre agradables, por parte de su familia.
• Habrá comparaciones: Es inevitable que, entre los asistentes a la boda, haya algunos que te comparen con la novia. Que si ella es más o menos simpática, que si hacen mejor o peor pareja que la que hacía contigo, que si contigo estaba más o menos feliz… Son frases que puede que no quieras escuchar, pero que te arriesgas a que lleguen a tus oídos ese día.
• El encuentro con “ella” puede resultar incómodo: Aunque para ti puede que resulte de lo más natural haber ido a la boda de tu ex, cabe la posibilidad de que para su chica no suceda lo mismo. Al fin y al cabo, ver en tu boda a la ex de tu pareja no suele ser un momento de lo más agradable y puede que el encuentro resulte un poco frío.
• A tu pareja puede no gustarle la idea: Del mismo modo que a la recién estrenada mujer de tu ex, puede que tu chico no termine de entender por qué tenéis que ir a la boda de tu ex. Intenta evitar esa pelea, porque tienes las de perder en ella, como te contábamos en este post sobre las cosas que no debes contar a tu pareja de tus relaciones anteriores.

guardar

Foto: Studio LM Photography.

Si decides no ir…

Pros

• Evitarás las situaciones incómodas: Como te hemos dicho antes, pueden darse tanto con la novia, como con la familia de tu chico e incluso con tu pareja.  Tu ex seguramente comprenda tus razones para no acompañarle en ese día y te ahorrarás más de un disgusto.
• Tu bolsillo te lo agradecerá: Por mucho que te gusten las bodas, ir a una de ellas supone un gasto que, en muchas ocasiones, puede no venir del todo bien asumir. Si finalmente decides declinar amablemente la invitación (en este post puedes encontrar las claves para hacerlo), te ahorrarás ese gasto, lo que no vendrá mal a tu economía.

Contras

• Puedes dar una idea equivocada: Que no vayas a la boda no tiene por qué significar que no has superado la ruptura o que te parece mal que él rehaga su vida, pero las malas lenguas pueden convencerle de que es así.

En cualquier caso, la decisión sobre asistir o no a la boda de un ex es algo muy personal y debes ser tú y solo tú, sin presiones quién lo decida. ¿Qué opción escogerías en tu caso?