Ha sido lo más comentado de la semana y seguro que fue TT (Trending Topic) en Twitter durante su emisión. Aunque quise resistirme no pude y ayer, como muchos otros españoles, asistí a la boda de la tele. Se juntaba mi pasión por este medio y mi profesión actual; las bodas.
Agradezco mucho que se abra un hueco al sector nupcial en la televisión pero tengo mucho que decir. Es obvio pero una boda es más que el acto de casarse en sí, es la organización de un momento íntimo que quieres compartir con todos los que te quieren. Y es cierto que a los novios les gusta colgar sus fotos de la boda en las redes sociales ( y a nosotros nos encanta verlas ) pero de ahí a compartir tus sentimientos y los de tu familia y amigos delante de las cámaras hay un gran paso.
Los preparativos son mucho más que elegir el vestido de la novia y el traje del novio, supongo que el Wedding Planner que han elegido ( Marc Giró) para el programa, se habrá quedado con ganas de “decorar el plató” como si eso fuese una boda de verdad y no un circo kitsch . Espero que le dejen ejercer su profesión porque en España tenemos muy buenos organizadores de bodas y estaría bien que se mostrara su buen hacer.
Pasando por alto el tópico de “la guerra de suegras” que no funciona cuando es forzado, hay varias puntos que me parecen totalmente innecesarios para retransmitir esta boda por la tele. La primera es en cuanto al cuerpo del novio, ¿es necesario decir que el chico tiene complejo de su cuerpo? ¿En qué país vivimos? ¿En serio que este chico está gordo? ¿Qué valores les vamos a dar a los espectadores respecto a la belleza? Por otro lado, por mucho que el presentador haga el papel de oficiante de la ceremonia ¿tiene que obligarles a decirse algo antes de casarse? ¿No debería ser algo espontáneo? Sí, sé que eso es tele y sé como funciona pero a hay cosas que te hacen sentir incómodo incluso como espectador.
Por no hablar de cuántas veces les han hecho reconocer a los dos y a todos sus familiares que ellos no podían casarse. Tenía que quedar claro que todo esto es para hacerles un gran favor a los novios. Por cierto, una pareja entrañable y muy bien elegida.
Espero que cuando vean los datos del share se les pasen los nervios que tanto hemos escuchado y pocos hemos sentido viendo este primer programa. Y ahora la pregunta es, después de ver esto ¿cuántas parejas más van a dejar que les presionen así hasta conseguir sus lágrimas por una boda? ¿Por qué no lo hacen al revés y dejan que se casen como ellos quieran ayudándoles económicamente y sólo ponen las cámaras como testigo? Eso sí sería retransmitir una boda y no lo que vimos ayer.
Ah, se me olvidaba que eso no tiene el mismo índice de audiencia…
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