Esta noche, la Luna tendrá un tamaño mayor y brillará mucho más que en días normales. Este fenómeno no se ve desde 1948 y no se repetirá hasta el año 2034. Con motivo de tan fenomenal acontecimiento, analizamos cómo influye la Luna en las mujeres y todo lo que hay que tener en cuenta para entender esta bella relación.
Brevísimo contexto histórico
La Luna es el único satélite natural de la Tierra. De hecho, hace millones de años, este brillante guardián espacial formaba parte del grueso de nuestro mundo. Según la llamada teoría del gran impacto, tras un fuerte choque de nuestro planeta con el protoplaneta Tea, un pedazo de la superficie se desgranó y fue expulsado al espacio: así surgió la Luna. Desde entonces, su poder, similar al de un potente imán, ejerce una influencia sobre nosotros mucho más alta de lo que parece. Junto al Sol, su leal compañero de fatigas, es la causante de las mareas de nuestros mares y océanos, pero, además, guarda una fuerte relación con el género femenino.
Menstruación
Quizá nunca te hayas fijado, pero el ciclo lunar coincide con el ciclo menstrual: 28 días. Mientras la luna comienza su viaje desde su estado de luna nueva hasta el de luna llena, la mujer hace lo propio con una expedición a través de las selvas de su feminidad. Muchos asocian este fenómeno a la coincidencia, más aún si ubicamos el ciclo menstrual entre los 25 y los 33 días y no entre los 28 exactos. Pero esta variación depende de las mujeres: el estrés, el humor, el cansancio y los anticonceptivos son los responsables de los desajustes que varían los parámetros naturalmente establecidos. En condiciones normales, los 28 días suelen cumplirse habitualmente. Cuando varias mujeres conviven, sus menstruaciones se sincronizan y se adaptan al ciclo lunar. ¿Casualidad? Seguro que no.
Embarazo
Leyendas, mitos, historias… Desde Zankyou, más que adentrarnos en terrenos espirituales, tiraremos de estadística para explicar esta teoría. Aunque científicamente no está demostrado, los nacimientos son más comunes cuando en el cielo brilla una magnífica luna llena. No siempre es así, pero sí es cierto que el resto de nacimientos coinciden con el momento estrella de las fases lunares.
¿Por qué puede darse esto? Como todo el mundo sabe, el cuerpo humano tiene alrededor de un 70% de agua. Esta cantidad de líquido aumenta durante el embrazo debido a la presencia del líquido amniótico. Si la Luna afecta en la subida y bajada de mareas, moviendo grandes masas de agua, ¿qué no hará con la cantidad que albergamos en nuestro cuerpo (pequeña en comparación con la de los océanos)? No somos hombres-lobo, pero la Luna nos afecta de alguna forma extraña, más aún si llevamos una vida latiendo en nuestro interior. ¡Las estadísticas lo demuestran!
Mitos interesantes
La vinculación de la mujer con la Luna viene de muy lejos. Aunque la mujer y su naturaleza han sido cuestionadas vilmente por muchas culturas, su fuerza es tan implacable que ha traspasado las fronteras terrenales, aunque sea dentro de ciertos mitos. Algunos de éstos, sin embargo, tienen cierta lógica. En este sentido, se han encontrado cuatro arquetipos de mujeres estrechamente ligados al proceso lunar.
La doncella es el principio y se hermana con la luna creciente. Es el momento de pre-ovulación, de inocencia y de planificar. En la fase de ovulación, durante la luna llena, la mujer está lista para albergar vida, florecer y asemejarse a la Madre Tierra en su concepto creador. Es la madre. Seguidamente, la chamana o hechicera representa a la luna menguante, justo en la fase pre-menstrual. En este momento, la mujer es especialmente creativa y sexual, y se entrega a un misterioso viaje interior. Finalmente, durante la luna nueva, la mujer, denominada la anciana, menstrúa y algo se apaga en su interior, algo que, a su vez, se regenera y vuelve a la vida para continuar con el proceso. Es sabia y se refugia en la introspección, en el mundo espiritual.
¿Sabías todas estas teorías y leyendas sobre la Luna? Siempre hemos imaginado a nuestro satélite como una mera lámpara nocturna a la que un tal Neil Armstrong llegó en 1969. Sin embargo, el motivo que supuso “un pequeño paso para un hombre, pero un gran salto para la humanidad” ha albergado una mística muy especial desde mucho antes. Esta noche, su poder será mucho más grande y brillante. ¡No pierdas detalle y piensa en estas historias mientras las observas!
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