Para la mayoría de madres, el hecho de que sus hijas estén prometidas y pronto vayan a contraer matrimonio puede generarles un huracán de sentimientos encontrados que en ocasiones resulta difícil controlar. Desde Zankyou te damos los mejores consejos para que la boda de tu hija se convierta en uno de los días más felices de tu vida también para ti.
Seguro que echas la vista atrás piensas en tu boda y no te importaría cambiar ciertos detalles. Es lógico porque las posibilidades del mercado y el el universo de las bodas se han convertido en uno de los nichos de mercado más importantes de los últimos años.
A pesar de que existen multitud de profesionales que os pueden orientar y ayudar en casi la totalidad de la organización, también se multiplica la dificultad de decisión ya que hoy en día es posible crear la boda de tus sueños. Por lo tanto, ten en cuenta ante todo el gusto y preferencias de tu hija y apóyala en todo.
1. Recuerda que no es tu boda
Parece obvio este tip ¿verdad? pues aunque parezca mentira, hay algunas madres que no son capaces de llevarlo a cabo. Años atrás, las alternativas en cuanto a organización, decoración, vestidos etc. no eran ni la mitad de vanguardistas y originales como lo son ahora y en ocasiones las madres tienden a recomendar lo que a ellas les gustaría. Es lógico que des tu opinión, pero respeta siempre los deseos de tu hija. En ocasiones mantenerse al margen es lo preferible.
2. Viste de acuerdo al protocolo
Recuerda que la protagonista de este día es tu hija. Debes resaltar por tu elegancia entre los invitados, no por ningún otro motivo. Por lo tanto apunta bien estas advertencias.
– Color: ya sabrás que tienes que huir del blanco, pero también del beige, blanco crudo, marfil y otras variantes. A pesar de que a simple vista se pueda diferenciar perfectamente el tono de tu vestido con el de tu hija, no es recomendable que haya ni un atisbo de duda.
– Tocado: recuerda que la madrina es la persona que debe llevar mantilla, y gracias a este complemento se os diferenciará. Opta por una pamela si es una boda diurna o un pequeño tocado si es nocturna.
– Vestido: Lo más aconsejable para la madre de la novia es un vestido por la rodilla o debajo de esta o en su defecto un traje de dos piezas. Si la boda se celebra por la noche lo apropiado será un traje largo de noche.
En cualquier caso conviene que hables con la madrina y las damas de honor para optar por trajes y complementos dispares con el objetivo de poder distinguiros tanto en el día B como en el posterior álbum de fotos.
3. Formalidad
Las estrellas de este gran día son sin duda los novios, pero tú también tendrás tu papel. Lo correcto es una actitud discreta, refinada y conciliadora. Sé amable con todos los invitados y disfruta de uno de los días más especiales de tu vida junto a tu hija.
4. No compares
No será la primera vez que escuches aquello de que las comparaciones son odiosas ¿verdad? pues en este caso más si cabe. Es probable que hayas asistido a multitud de bodas antes que a la que tu hija y te hayan gustado y disgustado cosas a partes iguales. ¡No importa! son detalles irrelevantes de cara a la de tu hija. Trata de hacer críticas constructivas y transmite tu experiencia y sabiduría con todo el cariño del mundo.
5. Actitud positiva
Nadie dijo que organizar una boda fuese una tarea fácil. Por ello mantén la calma y la cordura en todo momento. Asiste a tu hija en todo lo que necesite si ella te lo pide (pero sin agobiar). Es probable que cuando llegue el gran día, la mezcla de emociones se apodere de tu cuerpo, pero es importante que no lo transmitas. De lo contrario se lo trasladarás a tu hija y no disfrutará al cien por cien de su boda.
Si estás de enhorabuena y tu hija se casa en unos meses, no olvides apuntarte estos sencillos pero valiosos consejos. Evita caer en estos errores y ¡presume de la boda de tu hija!
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