A parte de la elección del vestido, ¿qué otra preocupación tienen las novias? Como buena protagonista: ser la más guapa de la fiesta, y conseguir estar radiantes pero sin abandonar la naturalidad y sintiéndose ellas mismas.
Es en este punto donde las novias se tienen que dejar asesorar por los profesionales de la belleza y la estética. Cada novia es un mundo y, por lo tanto, es lógico que cada una siga un tratamiento personalizado, que realce los atributos que más quiera destacar, y que mejore o corrija cualquier tipo de problemática estética.
El denominador común a todas las novias es lucir una piel lo más perfecta posible, luminosa y, en la mayor parte de los casos, que haga posible poder lucir un maquillaje ligero y natural el gran día.
Los tratamientos más demandados son los faciales llevados hasta el escote, siendo los estrella el peeling (suave, medio o más profundo) que hace las veces de limpieza de cutis en profundidad y de exfoliante dejando la piel radiante; la mesoterapia con vitaminas y/o ácido hialurónico para revitalizar, hidratar e iluminar el rostro, y la radiofrecuencia combinada con tratamientos cosméticos dependiendo del tono y grado de madurez de la piel.
Otro gran previo muy común antes de la llegada del gran día es la dieta profesional. Y es que, en muchísimas ocasiones, un objetivo, una fecha concreta y el deseo de lucir un vestido de forma fabulosa, actúan como el mejor aliciente y motivación para perder esos kilitos de más. Para ello, lo más recomendable es acudir a un profesional que nos haga un programa personalizado, para llegar al objetivo sin perjudicar nuestra salud y nuestro aspecto.
Además, un gran número de novias opta por combinar los tratamientos faciales con tratamientos corporales, con vistas a lucir tipo durante la luna de miel. En estos casos, los tratamientos más demandados son los anticelulíticos: ultrasonidos + presoterapia y mesoterapia corporal.
Si bien, el protagonismo ese gran día es de la novia, las invitadas, sobre todo las más cercanas, también ponen todo su interés por estar fantásticas para la ocasión. Por esta razón, los tratamientos pre-boda han dejado de ser terreno exclusivo de las novias.
Lo importante es ponerse en manos de profesionales, que diseñen programas a medida de cada novia, teniendo en cuenta su tipo de piel y edad. Cada persona tiene una necesidad concreta y lo importante es dar con el programa adecuado de la mano de expertos en la materia.
Autor invitado: Marta Jiménez de Momentos y Eventos
Experta en organización de bodas
¿Eres experto en bodas y quieres escribir en Zankyou? Contáctanos
¿No te quieres perder las últimas novedades para tu boda?
Suscríbete a nuestra newsletter
Escribir un comentario