El matrimonio es una institución social que permite crear un vínculo entre sus dos miembros y que se convierte en una unión de reconocimiento social y de acuerdo a ciertas normas jurídicas con sus derechos y obligaciones. Esto es una descripción a grandes rasgos pero existen varios tipos que tienen lugar en determinadas circunstancias que si bien no suelen ser habituales, merece la pena explicar en qué consisten cada una de ellas.
Matrimonio ‘in articulo mortis’
Cuando se piensa en amor y en matrimonio se sueña siempre con que será largo y feliz, pero por desgracia, en ocasiones, la vida nos pone en situaciones que nunca nos hubiéramos imaginado estar. Y sin duda, el matrimonio “in articulo mortis” es una circunstancia que esperamos no tengáis que vivir. Y es que la norma general es que el matrimonio solo puede celebrarse tras haber cumplido con todos los trámites y requisitos que establece la ley, sin embargo, existe un caso por el cual puede realizarse sin cumplir las formalidades. Y esto sucede cuando alguno de los contrayentes se encuentra en peligro de muerte
Desde AM Abogados explican: “El matrimonio “in extremis” o “in articulo mortis”, también llamado matrimonio por causa de muerte, hace referencia al matrimonio en el que uno de los contrayentes está a punto de morir, por lo cual las legislaciones permiten acelerar los trámites necesarios. Esta circunstancia de que uno de los contrayentes esté en peligro de muerte o próximo a ella, autoriza omitir inicialmente determinadas formalidades exigidas normalmente“.
Requisitos del matrimonio “in articulo mortis”
El matrimonio en peligro de muerte o in articulo mortis puede ser autorizado por un mayor número de personas que el enlace en circunstancias ordinarias. Son competentes el Juez encargado del Registro Civil y el delegado de éste, aunque ninguno de los contrayentes resida en su jurisdicción. En caso de matrimonio celebrado a bordo de un buque o embarcación, será autorizado por el comandante o capitán.
Debido a las especiales circunstancias que rodean a esta modalidad de matrimonio in extremis, está exento de la elaboración previa de expediente, pero sí se exige la presencia de dos testigos mayores de edad. Una vez se inscriba el matrimonio en el Registro Civil o en la respectiva parroquia, el encargado de hacer la inscripción debe revisar si se cumplen todos los requisitos de validez del mismo, y que no esté incurso en alguno de los supuestos de impedimento matrimonial o de nulidad matrimonial.
Matrimonio en secreto
Por otro lado, queremos hablaros de otra modalidad poco habitual del matrimonio como lo es el secreto. Se entiende por matrimonio secreto el que se celebra por causa urgente y grave, llevando en secreto las investigaciones que han de hacerse antes de todo matrimonio, quedando obligados a guardar el secreto de su celebración el oficiante, los testigos y los cónyuges.
Desde Enciclopedia Jurídica explican: “Se entiende por matrimonio secreto (antes llamado «de conciencia») aquel que, por causa urgente y grave, el Ordinario del lugar permite que se celebre llevando en secreto las investigaciones que han de hacerse antes de todo matrimonio y, al tiempo, quedando obligados a guardar el secreto de su celebración el ordinario del lugar, el asistente, los testigos y los cónyuges”.
Su gran peculiaridad es la no publicación del matrimonio (artículo 54 del Código Civil). El expediente se tramita de modo reservado, sin anuncio público y es autorizado por el Ministro de Justicia. Se inscribirá en un registro especial que se gestiona en la Dirección General de Registros que depende del Registro Civil Central.
La obligación de guardar secreto extingue cuando se origine un grave escándalo o una grave injuria al matrimonio mismo, y así debe ser advertido a las partes antes de la celebración del matrimonio.
Esperamos haber resuelto las dudas con respecto a estos términos que si bien no son habituales, sí existen y merece la pena dejar claro en qué consisten.
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