¿Cuánto tiempo tiene que pasar para volver a casarse después del divorcio?

Casarse después del divorcio es algo cada vez más habitual. Que una relación salga mal no quiere decir que haya que renunciar al amor ni a crear un proyecto de vida en común. Por eso, crece el número de personas que se han casado más de una vez.

Sabemos que el divorcio conlleva unos trámites que pueden alargarse en el tiempo, aunque hoy en día el proceso es mucho más rápido que hace unas décadas, cuando los procedimientos legales de separación se prolongaban durante años. Imaginemos que en ese tiempo has encontrado a una persona de la que te has enamorado y con la que quieres compartir tu vida, ¿puedes casarte en cuanto estés divorciado o tienes que esperar algo de tiempo?

Plazos del divorcio

A la hora de poner fin a tu matrimonio hay varios plazos que deberías tener en cuenta. Para empezar, el Código Civil nos dice que no puedes plantear una demanda de divorcio hasta que no hayan transcurrido tres meses desde la fecha del enlace.

Una vez iniciado el proceso, vas a tener que esperar varios meses. El tiempo medio que se tarda en tramitar un divorcio de mutuo acuerdo en España es de cuatro meses. Si estamos ante una separación no amistosa que discurre por los cauces del divorcio contencioso, el plazo puede irse a los 12 meses.

Hoy en día ya no suele pedirse la separación legal, puesto que este ya no es un requisito para poder divorciarse. No obstante, es importante que tengas en cuenta qué, si estás separado de hecho o legalmente, no te puedes volver a casar. Porque, a efectos legales, tu estado civil sigue siendo el de casado.

Tendrás que esperar a que se resuelvan todos los trámites relativos al divorcio y se dicte la correspondiente sentencia para que tu matrimonio haya finalizado por completo. A partir de ese momento serás de nuevo una persona soltera.

Casarse después del divorcio: la importancia de la inscripción de la sentencia

Tanto si el divorcio es de mutuo acuerdo como si es contencioso, deberá reconocerse a través de una sentencia emitida por el juez competente. De ella se da traslado al Registro Civil, que procede a inscribir el divorcio en los asientos registrales correspondientes a los que en su momento fueran pareja.

Esta es la forma oficial de dejar constancia de que el vínculo matrimonial ha quedado disuelto y se ha producido una alteración en el estado civil de los interesados. Han dejado de ser personas casadas y han vuelto a ser solteras.

Aunque normalmente hablamos de estados civiles tales como soltero, casado, separado, divorciado o viudo. A efectos legales solo hay dos: soltero o casado. Una persona viuda, separada o divorciada es soltera en términos de su estado civil.

La sentencia debe ser firme

Una cuestión importante a la hora de casarse después del divorcio es que la sentencia no se inscribe en el Registro hasta que no es firme. Porque una vez dictada existe un plazo para su impugnación. Agotado el mismo sin que nadie recurra (suele ser lo más común), entonces se lleva a cabo la anotación en el Registro Civil.

Además, la práctica de la anotación del divorcio puede tardar un poco si el Registro tiene una gran cantidad de trabajo. Por eso, entre que se dicta la sentencia de divorcio y se vuelve a cambiar legalmente el estado civil de una persona, pueden pasar unos 30 o 60 días. A partir de ese momento, el interesado es soltero y puede volver a casarse si lo desea.

Casarse después del divorcio

Finalizados todos los trámites para la disolución del matrimonio, cualquiera de los ex cónyuges puede volver a contraer matrimonio. Incluso es posible que se casen de nuevo entre ellos. Esto, que puede sonar raro, es más común de lo que crees.

En cualquier caso, para celebrar el enlace es necesario que se instruya el expediente matrimonial. Si uno de los contrayentes (o ambos) ha estado casado con anterioridad y se ha divorciado, deberá aportar copia del certificado de matrimonio anterior donde conste la anotación del Registro que acredita que ese matrimonio  está legalmente disuelto.

Mejor no esperar al último momento

Son muchas las parejas que deciden separarse, pero no se divorcian inmediatamente. Con el paso del tiempo rehacen su vida con otras personas y años después se dan cuenta de que su vínculo matrimonial con la pareja anterior no ha sido disuelto.

Entonces llegan las prisas para hacer todo el papeleo y contraer matrimonio. Aunque ya hemos visto que normalmente no hay que esperar demasiado si es un divorcio de mutuo acuerdo (que es el trámite lógico a seguir si la pareja lleva años sin tener relación), si pasarán unos cuantos meses antes de que la persona esté legalmente divorciada. Por eso, lo recomendable es hacer el trámite lo antes posible y estar soltero a todos los efectos legales, aunque no se desee volver a contraer matrimonio.