¿Cuáles son las principales preguntas en las entrevistas matrimoniales?

Nadie puede ponerle barreras al amor. Cuando dos personas se quieren y desean casarse, el hecho de que sean de nacionalidades diferentes no es un obstáculo. Sin embargo, con el fin de evitar fraudes, en el caso de los matrimonios mixtos se exige un requisito especial. Se trata de las entrevistas matrimoniales. Una práctica que no es necesaria llevar a cabo cuando ambos contrayentes son españoles.

El matrimonio y su influencia en la obtención de la nacionalidad española

Hasta la reforma del Código Civil en 1975, regía lo que se conoce como nacionalidad por matrimonio. Esto quería decir qué, si un ciudadano extranjero se casaba con un español, adquiría de forma inmediata la nacionalidad española.

Tras el cambio legislativo se eliminó esta posibilidad, pero se estableció un sistema que disminuía el tiempo de espera. Ahora, los extranjeros casados con españoles pueden empezar a tramitar su solicitud de nacionalidad cuando puedan acreditar que llevan un año de convivencia ininterrumpida. Plazo que se empieza a contar desde que el no nacional obtiene el permiso administrativo que le habilita para residir legalmente en España.

Esto es una ventaja muy importante con respecto al resto de ciudadanos extranjeros residentes en España, puesto que el plazo general para poder solicitar la nacionalidad es de 10 años. El resto de trámites son iguales en todos los casos, no se concede ningún otro beneficio por el hecho de que el cónyuge del solicitante sea español.

Se entiende que esta notable reducción del tiempo de espera es lo suficientemente atractiva como para que surja en algunas personas la tentación de acortar los plazos contrayendo un matrimonio de conveniencia. Es decir, fingiendo que tienen una relación con un nacional y casándose con él o ella para poder pedir antes la nacionalidad española. Esto es, precisamente, lo que se trata de evitar con las entrevistas matrimoniales.

El expediente previo al matrimonio

Siempre que se va a celebrar un matrimonio, es necesaria la elaboración de un expediente a través del cual la Administración verifica que no existe ningún obstáculo ni impedimento para que los interesados se casen.

Cuando uno de los contrayentes es español y el otro extranjero, es necesario que se lleven a cabo las entrevistas matrimoniales. A través de ellas, se trata de verificar que los interesados quieren casarse porque tienen un proyecto de vida en común, no porque exista ningún interés relacionado con la obtención de la nacionalidad española. Es decir, que no están intentando contraer un matrimonio de conveniencia.

¿Cómo son las entrevistas matrimoniales y qué preguntas se hacen?

Se cita a ambos contrayentes el mismo día. Cada uno de ellos realiza la entrevista por separado con el responsable del Registro Civil. Cuando uno sale del despacho el otro entra, así existe la seguridad de que no hablan entre ellos ni se pasan información.

No existe una lista cerrada de preguntas que pueden hacerse en las entrevistas matrimoniales. Son cuestiones que tratan de acreditar que existe una verdadera relación de pareja. Pero sí suelen agruparse en tres grupos. El primero versa sobre información personal, el segundo sobre la vida profesional, y el tercero sobre cuestiones más privadas. Veamos algunos ejemplos:

• ¿Cuál es su comida favorita y la de su pareja?
• ¿Dónde fueron en sus últimas vacaciones?
• ¿Cómo se llamaba o se llama la madre de su futuro esposo o esposa?
• ¿Cómo se conocieron?
• ¿Por qué han tenido una relación tan corta antes de decidir casarse?
• ¿Dónde vivirán tras la boda?
• ¿Tiene hijos su pareja de una relación anterior? Si es así, ¿cómo se llaman y qué edad tienen?
• ¿Cuál es la profesión de su prometido o prometida?
• ¿Qué aficiones tienen en común?
• ¿Ha visitado su país en compañía de su pareja?
• ¿Quién hace habitualmente la compra en casa?
• ¿Dónde guarda la ropa de invierno en su domicilio?
• ¿En qué lado de la cama duerme?
• ¿Cuánto pagan de alquiler o de hipoteca?

Cómo has comprobado, no son preguntas nada rebuscadas ni difíciles de contestar. Si dos personas tienen una relación real, no tendrán ningún problema a la hora de superar el cuestionario. No obstante, siempre se admite algún pequeño error.

Lo que busca el encargado del Registro es que haya una coherencia entre la historia que cuentan ambas partes. Si sus respuestas son más o menos similares, considerará acreditado que hay una relación de pareja normal y corriente.

¿Qué ocurre si las entrevistas matrimoniales no salen bien?

Pasa justo lo que estás imaginando, que el encargado del Registro no permitirá la celebración del matrimonio. No obstante, puedes interponer recurso ante la Dirección General de los Registros y el Notariado, alegando lo que estimes conveniente y presentando las pruebas que puedas.

Lo mejor para afrontar este trámite es que os lo toméis con naturalidad y sin preocupación. No pasa nada si no sabéis una respuesta, o si en algo no coincidís. Lo importante es que, en su conjunto, los datos que aportéis sean equivalentes. Algo que ocurrirá de forma natural si vuestra relación es real.