La Finca Mas Solers es un palacete de estilo renacentista catalán de finales del siglo XIX, albergó el antiguo Gran Casino de Barcelona y fue testigo de una época dorada. Se encuentra a tan sólo 30 minutos de Barcelona y 5 minutos de Sitges, celebrando todo tipo de eventos y actos en sus instalaciones.
Actualmente en la Finca Mas Solers hacen realidad los sueños de cada pareja. Saben que no todos los novios son iguales, ni que todo el mundo tiene el mismo estilo, por ello su equipo de profesionales les ayudará a que su celebración sea única. Ofrecen bodas y celebraciones a medida en un entorno privilegiado.
En la Finca Mas Solers disponen de una gran variedad de espacios donde celebrar bodas. Ofrecen un espacio para cada estilo. Su personal os asesorará de forma profesional para convertir la celebración en un evento muy especial.
El Salón Hispano-Suiza cuenta con mil metros cuadrados libres de columnas y se accede a él por la puerta principal. Este salón os permite una gran recepción con más de mil asistentes.
El Salón Grace, construido en la segunda reforma, es un espacio abierto con vistas directas al jardín. A él podréis acceder desde los vestíbulos principales y a través del jardín. Es el salón más moderno de la Finca, predominan los colores neutros. También podréis disfrutar de su exclusivo escenario para diversas actuaciones o convertirlo en una discoteca.
El Celler, la antigua bodega de la finca, también se erige para que la tengáis en cuenta en cualquier tipo de celebración. Jugando con una ambientación rústica aunque con toques modernos brinda una sala acogedora y diáfana.
En cuanto a las celebraciones para grupos más reducidos la finca cuenta con el salón Bacarrá donde podrán disfrutar de una perfecta intimidad.
Los jardines destacan en una finca increíblemente elegante. Entre ellos encontramos los jardines de fuentes y los de Mónaco, en los que complementar vuestra celebración con un aperitivo o la instalación de una carpa.
Por último, un Anfiteatro donde celebrar una boda singular y sorprender a todos los invitados.
En primer lugar lamentamos el malentendido. Como se detalla en el dosier de bodas y banquetes, existe una penalización siempre que no se llegue al mínimo de comensales estipulado para cada salón. En el caso del primer nivel, el mínimo es de 125 personas. Al tratarse de 25 personas, un sábado de julio (pico más alto en nuestra producción) teníamos que ser estrictos en este sentido. En el caso de realizarse un viernes, podría negociarse, pero en ningún caso suprimir por completo dicha penalización.
Una vez más disculpas por este malentendido y desde Finca Mas Solers os deseamos mucha suerte en esta nueva etapa.
Un saludo.