En Cañaveral, Cáceres, se encuentra Floristería Herval, donde encontraréis todo un mundo para expresar vuestros sentimientos y sorprender a los invitados a través de las flores.
Los profesionales de la floristería escucharán vuestras ideas y propuestas y os presentarán diferentes opciones para que podáis elegir. Harán las composiciones, de forma exclusiva para vosotros, consiguiendo sorprenderos por su imaginación y buen hacer.
Profesionales ampliamente preparados que se pondrán a vuestra disposición para que todo sea perfecto el gran día. Ramos de novia, prendidos, regalos para vuestros invitados que os sorprenderá. Una amplia variedad de plantas y flores para que todo sea especial y que vosotros sintáis que vuestro sello está impreso en la decoración.
Floristeria Herval, dispone en exclusiva de Flor Hidrogenada para hacer que vuestras decoraciones no se marchiten y estén frescas durante toda la ceremonia y mucho tiempo más, haciendo que recordéis vuestra boda a través de las flores elegidas para el gran momento.
Un servicio de envíos nacionales y unos precios sin competencia hacen de Floristería Herval la opción perfecta para que vuestra boda luzca esplendorosa con las flores de temporada que mejor definan vuestra personalidad.
Os proponen, además, crear diferentes espacios y decoraciones, con complementos como globos y otros elementos que sorprenderá a los invitados y que hará que recuerden vuestra boda con especial cariño, por los momentos y aromas que han impregnado vuestra ceremonia.
Los profesionales de Floristería Herval estarán a vuestra disposición para ayudaros y aconsejaros en cada paso y elección para que todo sea como siempre habéis soñado.
No envían el ramo. Es una estafa
AUN ESTOY ESPERANDO QUE ME ENVÍEN EL RAMO PARA UN FUNERAL QUE ENVIÉ. UNA VERGÜENZA QUE JUEGUEN CON ALGO ASÍ. SOIS UNA ESTAFA!!!!!!
Horrible, pedí dos ramos distintos, cada uno a una dirección. Nada que ver con las fotografías, ramilletes de flores marchitas y mustias. Eran para regalo y quedé fatal(sentí verguenza ajena). Además en uno de ellos pedí tarjeta de felicitación y jarrón de cristal y nunca llegaron. No pidais por nada del mundo aquí flores.