Marina Beach Club es una de los espacios más exclusivos y únicos de la ciudad de Valencia. Su inmejorable ubicación junto a la playa de Las Arenas hará que te puedas deleitar con unas vistas únicas, tus invitados tendrán un recuerdo maravilloso del gran día.
Cuentan con un equipo de profesionales que os ayudarán y estarán con vosotros en todo momento para ofreceros una experiencia única en la que sereis los protagonistas. Así podréis disfrutar plenamente de vuestro día especial.
Os ofrecen la posibilidad de personalizar todos los espacios y también el contratar un fotógrafo de confianza, además de contar con personal de refuerzo para la recepción de invitados. Su catering preparará un menú a medida de cada pareja, todo ello os brindará la calidad y tranquilidad que necesitáis, todo en el mismo lugar.
Servicio nefasto, nada de organización.
La calidad de la comida no está acorde ni con los precios ni con el sitio. O es comida preparada en otra cocina central y montada en el restaurante o el cocinero no es bueno.Pidas o no pidas pan te ponen una cestita muy pequeña de pan y te cobran 2 euros por comensal (íbamos 4 y nos cobraro 8 euros). Reclamé y argumentaron que es política de la casa pero que si no me parecía bien me devolvían el dinero ( te hacen pasar vergüenza en esta situación).Pedimos vino Miracle rosado que en carta lo clasificaban como Rioja y luego era de Valencia, se lo comentamos al camarero y su respuesta fue reirse y quitarle peso al error, nada más.Y como guinda final tenemos a Víctor, encargado del local: reclamando a uno de nuestros comensales de forma inapropiada, pendeciera, insistente y maleducado. Convirtió la cena en una experiencia más desagradable.Si Víctor pudiese permitirse económicamente restaurantes buenos se daría cuenta de su falta de profesionalidad, en un bar de carretera te tratan con más educación.No volveremos ni lo recomendaremos.