A 38 km de Madrid y camino de Chinchón, encontramos el Molino del Manto, un molino del siglo XVIII en un entorno sorprendente en el que se produce una simbiosis mágica entre la antigua edificación y su jardín romántico del s. XIX. El ramal principal del río Tajuña los recorre y atraviesa, formando todo ello un conjunto fascinante a tan sólo unos minutos de la capital.
Encontraréis multitud de ambientes diferentes, dentro de las dos hectáreas de jardines que dispone la finca para personalizar la boda, en los que se incluye una sonorización musical diseñada en cada espacio.
De la restauración se encargan prestigiosas empresas de cátering, que de común acuerdo diseñan con los novios el menú más apropiado, cocinando el día de la boda en el propio lugar.
El Molino del Manto cuenta con un eficaz equipo de weddings planners y decoradoras, que se encargan de coordinar completamente el evento.
El alojamiento para los novios y su familia está incluido, y forma parte de las múltiples posibilidades que ofrece este fantástico lugar.
Estuvimos en la boda de mis primos y realmente es un sitio muy especial y singular, al caer la noche parece que te traslada a otro lugar, el sitio te envuelve con el sonido del agua de fondo, la luz de las antorchas, la musica ambiente, el lugar se vuelve mágia.