Ana y Carlos se conocieron en Granada hace ya seis años. “Coincidimos allí cuando los dos nos fuimos a hacer la especialidad de Medicina y aunque trabajábamos en distintos hospitales, teníamos amigos en común que nos presentaron”, cuenta la pareja. Así saltó la chispa y de ser amigos pasaron a tener algo más, formando una preciosa pareja.
El verano de 2016, se fueron de viaje a Grecia a la boda de unos amigos. Una de las tardes estaban cenando en un restaurante de la isla de Santorini, disfrutando del atardecer con vistas a los acantilados cuando para tomar el postre les subieron a un reservado del lugar con la excusa de que les cambiaban a una mesa mejor. De repente se comenzó a proyectar un vídeo sobre ellos que Carlos había realizado y con el que le pidió matrimonio, con un anillo de oro blanco y diamantes de Joyería Sánchez, una empresa familiar de Granada.
Su boda se celebró el 1 de julio de 2017. Para tal día, Ana eligió un modelo con su mismo nombre de la firma Pronovias. Un vestido de talle bajo confeccionado en crepé y tul, con aplicaciones de pedrería en las manguitas y en el borde del escote de la espalda. En los pies lució unos zapatos personalizados de Uniq Shoes, unos stilettos con escote corazón, con la punta en charol rosa, cuerpo en ante rosa palo y tacones con mosaico estampado también en tonos rosas. Como pendientes, un regalo de su madre. Para el ramo, Ana confió en El Jardín Romántico, una floristería de Ciudad Real, del que resaltaban tonos morados y rosas con limonium y hojas de olivo, muy típico de la zona.
El maquillaje corrió a cargo de Pilar Romeral Centro de Estética y Cuidado Personal, una profesional que supo sacar la mejor parte de Ana, luciendo muy natural. De la peluquería se encargó Paloma Ureña, su prima y una gran peluquera, la cual le hizo una trenza deshecha acompañada de un recogido en la parte media, donde iba un prendido de Cris Camón. Joyas que lucisteis en la ceremonia, tanto él como ella: firmas del anillo de pedida y las alianzas.
Carlos, por su parte, optó por un chaqué azul con chaleco amarillo pastel, de Sagaz, una sastrería de Madrid. Acompañó su look de un reloj de Jaguar y unos gemelos de Massimo Dutti.
La ceremonia fue en la Iglesia Nuestra Señora de la Asunción de Calzada de Calatrava (Ciudad Real) y el banquete al aire libre en la Casa Rural El Tamujo de Calatrava. Una ceremonia emotiva donde no faltó detalle como los centros del altar, compuestos por margaritas blancas y los adornos de los bancos, paniculata blanca y morada.
El banquete fue dado por el catering Las Aguas, de El Viso (Córdoba) y la palabra que lo describe según los novios es “inmejorable”. Durante la cena, además, una amiga de Carlos, le dio una sorpresa a Ana (orquestada también por el novio) y les cantó la canción de Quiéreme de Nuria Fergó. Además, durante la cena Carlos entregó un ramo de flores a su abuela para agradecerle todo lo que había hecho por él durante muchos años. ¡Un detalle muy emotivo!
De la decoración de las mesas se encargó el servicio de wedding planner del propio catering y estaban formada por manteles florales de color sepia, las sillas de palillería blanca y los meseros fueron creados en relación con la temática: de Pedro Almodóvar. En cada mesa tenía el nombre de alguna de sus películas, además de una pieza de tronco como base y en el centro, tarros de cristal con lilas y espigas.
Como fotógrafo Ana y Carlos eligieron a Nacho Alba. “Nos encantó desde el primer momento, tanto él como el trabajo que hacía. Muy contentos con las fotos, muy naturales y que reflejan fielmente el momento vivido”, detallan.
Para el photocall crearon un patio andaluz. “Lo hicimos nosotros mismos con unas amigas dos días antes de la boda, con guirnaldas de feria, geranios, abanicos, una guitarra y trajes de flamenca que tanto ellos como ellas no dudaron en ponerse para amenizar la fiesta”, explican Ana y Carlos.
Para el momento del baile organizaron uno con un remix de varias canciones. La primera fue la de la Bella y la Bestia, después pasaron a una bachata de Prince Royce, llamada Te robaré; de ahí a La vida es un carnaval, de Celia Cruz y, por último, Levels de Avicii, con la que todos los invitados salieron al centro a bailar.
Como detalle, para ellas dieron un jabón artesanal hecho por la mujer del padre de Carlos que tiene una pequeña empresa de cosmética natural llamada La Margarita Feliz y que se encuentra en Maranchón (Guadalajara) y para ellos una botella de aceite de Calzada de Calatrava, de El Hoyazo.
Un día que Ana y Carlos resumen como inolvidable, lleno de emociones y con momentos únicos, estando rodeados de todos sus amigos y familiares. ¡Os deseamos toda la felicidad del mundo, pareja!
Lugar de celebración: Casa Rural El Tamujo de Calatrava | Vestido de novia: Pronovias | Traje de novio: Sagaz | Complementos de novia: Joyería Sánchez, Duran Exquse y Cris Camón | Complementos de novio: Jaguar y Massimo Dutti | Floristería: El Jardín Romántico | Catering: Las Aguas | Fotógrafo: Nacho Alba | Maquilladora: Pilar Romeral Centro de Estética y Cuidado Personal | Peluquería: Paloma Ureña | Detalles para invitados: Cosmética natural La Margarita Feliz | Invitaciones: Médicos Sin Fronteras | Viaje de novios: Viajes Catán
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