Boda original en el espacio
Hay tendencias que con el paso del tiempo se van afianzando. Una de ellas es encontrar maneras originales o transgresoras para celebrar una boda. Muchas parejas buscan dar un toque de originalidad en la fiesta, otras simplemente en el vestuario o en los detalles de boda y otras, más aventureras, prefieren romper con todo lo pre establecido e ir más allá.
Hay tendencias que con el paso del tiempo se van afianzando. Una de ellas es encontrar maneras originales o transgresoras para celebrar una boda. Muchas parejas buscan dar un toque de originalidad en la fiesta, otras simplemente en el vestuario, las invitaciones o en los detalles de boda y otras, más aventureras, prefieren romper con todo lo pre establecido e ir más allá.
Erin Finnegan y Noah Fulmor forman parte de ese selecto grupo de novios que desean hacer de su boda un evento inolvidable en todo sentido. Esta pareja neoyorkina tenía desde siempre la idea de celebrar su boda en el espacio y aunque no pudieron estar en el espacio interplanetario lograron algo de lo que ellos deseaban, ya que se convirtieron en la primer pareja del mundo en celebrar su boda en gravedad cero.
Para realizar la boda de esta original manera, los novios contrataron los servicios de Zero G, una empresa privada que, con el permiso de las Fuerzas Aéreas norteamericanas, ofrece a sus clientes vuelos parabólicos en un Boeing 727-200 y, por lo tanto, la posibilidad de experimentar la sensación de ingravidez como si estuvieran en el espacio.
La original boda se llevó a cabo el sábado en un vuelo sobre la Florida y para generar esta sensación de ingravidez, las maniobras parabólicas que realizaba el avión consistían en subir a una gran altura para luego dejarse caer libremente en varias ocasiones hasta que se cumpliera el tiempo estipulado para la ceremonia, que duró aproximadamente una hora. La ceremonia fue oficiada por el ex astronauta y co fundador de la empresa Richard Garriot, quien además por supuesto, es juez de paz.
La vestimenta de los novios fue totalmente acorde a la ocasión y al lugar donde se celebró la boda. La novia vestía un elegante vestido blanco largo, con volantes, sin mangas y acompañado por un tocado que sostenía su cabello recogido en un rodete. El novio, por su parte, lució un elegante smoking negro, moño y camisa blanca. Ambos llevaron joyas relacionadas con la temática: ella, unos pendientes con forma de planetas, mientras que él unos preciosos gemelos con forma de nave espacial.
En la boda no faltó el momento del intercambio de anillos, el lanzamiento del ramo, ni el beso de los novios… momentos que, por supuesto, fueron bastante complicados teniendo en cuenta la falta de gravedad y por lo tanto la inestabilidad en la que todos se encontraban.
Así que ya sabéis, con unos dinerillos y ganas de realizar una boda original, podéis contratar los servicios de esta empresa, que con gusto los hará sentir como en las nubes. O bien podéis incluirla en vuestra lista de bodas, como tantas otras parejas que buscan opciones originales para su boda. Y vosotros? os animaríais?
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