Las bodas son sinónimo de felicidad plena. Un sentimiento que se desborda por los cuatro costados de todas las personas que asisten a este gran día. Son pura alegría y, también, amor. Por eso, si eres de las que asiste sin acompañante es tu oportunidad de encontrarlo entre los amigos y familiares de los novios. Te contamos cómo gracias a estas sencillas 8 claves, ¡coge papel y lápiz!
Previo al día de la boda, puede que exista una fiesta en la que todos los invitados puedan conocerse, ya sea una despedida de soltero y soltera conjunta unas semanas antes o una cena la noche anterior al enlace. El caso es que en esos momentos el juego de seducción ya puede comenzar. En el caso de no poder asistir a las fiestas previas y de no conocer a todos los invitados, no te desanimes, esto no ha hecho más que empezar.
1. Contacto visual
El juego de miradas es el inicio de todo. Cuando dos personas se gustan y no se conocen, el primer contacto comienza con ese continuo cruce de miradas. Al principio parece ser de forma disimulada, pero si el intercambio continúa se hacen de forma directa e incluso manteniendo la mirada por unos segundos. Es un detalle clave para conquistarle.
2. Comunicación no verbal
Las miradas son parte de ella, pero en este caso nos referimos a dar otro paso: sonreír. La sonrisa, en todo el mundo e independientemente del idioma hablado, es una forma de comunicarse que no necesita palabras. Una sonrisa puede ser de lo más sensual e intrigante.
3. Hablar
Sí, es el siguiente paso. Algo muy sencillo en nuestro día a día y que nos cuesta tanto a la hora de ligar. Pero advertimos que no vale con hablar sobre cualquier cosa que en esta vida ¡hay que ser originales! Nada de frases hechas o piropos absurdos, que los dice cualquiera. Como sugerencia te proponemos hablar sobre algún aspecto de la boda y de paso soltar algo gracioso a la persona en cuestión. Qué te parece comentar algo así que diga, “¿cómo puedo salir fuera?” y de paso “¡qué pena no haberte visto antes!”. ¡Quedarás genial y le sorprenderás!
4. Sentido del humor
Ya que has dado un paso tan importante ahora lo que necesitas es ser divertida y graciosa. No hay nada mejor que hacer reír a otra persona. El ingenio debe ser tu aliado en estas ocasiones. Si consigues hacerle reír, todo será mucho más fácil para ambos. ¡No lo dudes!
5. Estar relajados
Aunque la situación sea tirante, hacer bromas o reír será la medicina que curará esos nervios. Tienes que saber dónde estás, con quién y en qué situación. No todo vale porque no estás con alguien que ya conozcas. Ten tacto al hablar de ciertos temas, relájate y ¡la chispa surgirá!
6. Ser tú misma
La base de todo esto es que seas tú misma. Nada de forzar situaciones, de hacerte la difícil, la borde… Siéntete cómoda, ¡le gustarás seguro!
7. Interésate por la otra persona
Hablar de yo, me, mi o conmigo no es la solución a estas situaciones. Hablar de vuestros gustos en común, la música que prefiere, el tipo de comida… Aunque haya cosas que los hombres hacen diferentes a las mujeres, siempre habrá algo nuevo que descubrir. Y, por supuesto, ¡nada de estar con el móvil mientras hablas! Ya tendrás tiempo de mirar y compartir cosas en tus redes sociales.
8. Sé positiva
Como muchos otros sentimientos, éste también se transmite y no puedes estar en una boda sin pasártelo bien o sintiéndote mal. ¡Disfruta de estos momentos tan bonitos (y románticos)!
Quién sabe si después de todo esto has encontrado a tu media naranja… El destino no está escrito y además, siempre dicen que de una boda sale otra. Si no llega a eso, por lo menos disfrutarás de otra manera de este día y de paso podrás tener una bonita historia que contar. ¡Suerte con esa persona!
Selecciona a los proveedores que quieres contactar
¿No te quieres perder las últimas novedades para tu boda?
Suscríbete a nuestra newsletter
Escribir un comentario