La historia de amor entre Alicia y Nacho comenzó hace muchos años, allá por la época del instituto, pero ambos sellaron su amor para siempre en una de las ciudades más grandes y cosmopolitas de Europa, la capital de Reino Unido. La ciudad perfecta para poder disfrutar del arte, la música, la cultura, el amor, la gastronomía y vivir una pedida de mano de lo más espectacular a la orilla del Támesis frente al Big Ben.
Los novios
Alicia, para el día más esperado de su vida, se enfundó en el modelo Feist de la colección 2016 de Otaduy. Un diseño romántico con una espalda descubierta muy original, falda de gasa de seda y cuerpo de encaje.
Un vestido que lució con el modelo Pigalle en nude de la firma Louboutin, regalo de su hermana, y por supuesto con sus joyas más preciadas: su especial anillo de pedida, un solitario en oro blanco que realizó KGlez Joyas a partir de un diseño de Nacho, una pulsera de su madre y unos pendientes de piedras verdes.
El ramo de novia y los prendidos los realizaron en Floristería Iglesias, fue un ramo tipo bouquet de estilo silvestre con peonías blancas, rosas spray mini degradadas de rosa a blanco, paniculata y hojas de eucalipto. Los prendidos eran de paniculata y rosa spray.
De peinarla se encargó su peluquera de toda la vida de Marco Aldany, le hizo un recogido bajo de estilo romántico que embellecieron con un accesorio de lo más especial, con el mismo tocado que lució la madre de Alicia el día de su boda. Aunque le dieron un toque más actual tiñendo las flores de éste. Y de poner el toque de color al rostro de la novia, se ocupó Helena Domínguez, amiga y maquilladora profesional.
Nacho, por otro lado, defendió a la perfección un chaqué azul oscuro de Trajes Guzmán y lo lució con un elegante reloj en azul marino y los gemelos personalizados que le regaló su madre.
Ceremonia y banquete
La boda se celebró el verano pasado, el día 30 de julio de 2016 y tanto la ceremonia como el banquete se festejaron en la Finca Los Olivos, al norte de Madrid.
De la decoración floral de la ceremonia y del entorno en general, se encargó el equipo profesional de la Finca Los Olivos. El banquete también corrió de la mano de ellos, ya que disponen de cocina propia, y todos los asistentes pudieron disfrutar de un cóctel variado, de un candy bar estilo japonés y de una barra de cócteles especiales.
Como recuerdo, los invitados se llevaron una botellita de licor como recuerdo familiar y un tajín como guiño a la multiculturalidad de la tierra de los novios (Melilla), un recipiente de barro muy común en la gastronomía árabe en colores variados.
Baile de los novios
Para ese primer baile tan especial, escogieron el tema musical Powerful de Major Lazer con Ellie Goulding. Un momento mágico y único que jamás olvidarán gracias a las fotos y al vídeo que realizaron los chicos de Bamba&Lina, un equipo experto que se involucra desde el primer momento de la ceremonia y quiénes buscan la elegancia y la sencillez desde un punto de vista artístico y original.
Alicia y Nacho jamás olvidarán ese día tan especial que unió sus vidas para siempre. Un día increíble que pasaron en compañía de las personas que más quieren: su familia y amigos. Sin duda, una gran fiesta llena de momentos y detalles.
Lugar de celebración: Finca Los Olivos | Vestido de novia: Otaduy – Madrid | Traje de novio: Trajes Guzmán | Floristería: Iglesias Floristería | Wedding planner: Premier Bodas | Decoración – Catering: Finca Los Olivos | Fotógrafo y Videógrafo: Bamba & Lina | Maquillador: Helena Domínguez | Peluquero: Marco Aldany | Tarta de boda: The Dream Cake | Violín eléctrico: Sergey Maiboroda
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