Unidos por el vino y por el significado de sus nombres: Meritxell (luz de medio día) y Lorenzo (sol) son los protagonistas de dos bodas muy diferentes que os quiero mostrar aquí. Una boda en la Toscana por todo lo alto y una boda en un poblado de las islas Mentawai, en Indonesia.
Meritxell es española, sommelier y periodista y Lorenzo es italiano, enólogo y bodeguero. Se conocieron hace dos años durante una feria Alimentaria, en uno de los mejores bares de vinos de Europa, Monvínic Barcelona. ‘Cuando caté su Carandelle 2009 de IGT Maremma Toscana, un Sangiovese de su bodega Podere San Cristoforovino me quedé maravillada. Estoy acostumbrada a catar vinos buenos así que difícilmente me sorprende un vino a ciegos’, asegura la novia. Pero este vino biodinámico que se trata de manera ecológica y dependiendo de las fases de la luna, la enamoró. Cuando preguntó quien eran el enólogo y lo vio ya no había vuelta atrás. El amor les ’emborrachó’ tanto que no sólo se han casado una vez sino dos. Dos bodas muy distintas.
- Look de los novios
Para la boda en la Toscana, la periodista catalana eligió un vestido de novia de Rosa Clará, mezcla de dos modelos: la parte de arriba del Abanto y la falda del Argelia. Después para la cena Mertixell eligió otro look con una torerita de encaje y se quitó la cola para mayor comodidad. El novio lució un esmoquin confeccionado por GAS, una de las marcas líder del denim, ya que su diseñadora, Barbara Grotto es muy amiga de Lorenzo.
Para la boda en la junlga, la novia se puso un pareo de flores y una camiseta de tirantes negra, brazaletes y tocado de hojas y flores naturales de la jungla. Al novio le bastó con una bermuda oscura.
- El mismo sacerdote en las dos ceremonias
El Padre Pio es un misionero de Indonesia del pueblo de Lorenzo, Gambellara en el Véneto. El sacerdote se desplazó a Italia para casar a la pareja en una ceremonia católica y tradicional. Después la pareja quiso devolver el detalle al cura haciéndole una visita en Mentawai. ‘La ceremonia fue espontánea, nuestros votos improvisados y sin nada de estrés. Allí el rito del beso labio a labio se sustituye por olerse la boda y no olvidemos que yo soy ‘nariz de oro’, cuenta Meritxell simpática y orgullosa.
- Lugares de celebración y catering
La boda por la iglesia tuvo lugar en el Duomo di San Gimignano (Toscana) y la boda en la jungla fue en un poblado en Mentawaiano. El catering de la boda como podéis imaginar fue muy diferente; el de la boda en Italia lo sirvió Guidi Lenci, uno de los mejores del país mientras que en la jungla lo celebraron comiendo arroz blanco.
- Invitados
A la boda en Italia asistieron más de 300 invitados, un grupo de damas de honor todas de azul turquesa, amigas de la novia del colegio y muchos invitados conocidos en el mundo de la restauración y las bodegas. A la ceremonia en Indonesia sólo el sacerdote, la pareja y unos cuantos niños de la escuela en la que colabora el misionero. Los pequeños ayudaron a la pareja con los tocados florales. ‘La ceremonia fue espontánea, nuestros votos improvisados y sin nada de estrés. Allí el rito del beso labio a labio se sustituye por olerse la boda y no olvidemos que yo soy ‘nariz de oro’, nos cuenta orgullosa y divertida la sommelier.
- El mismo amor
Son dos versiones muy distintas de una boda pero ambas terminan con un beso.
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