Decía la gran fotógrafa norteamericana Berenice Abbott que la fotografía sólo puede representar el presente, ya que una vez fotografiado, el sujeto se convierte en parte del pasado, ¡y qué verdad es! A veces no se da la importancia que merece a este aspecto de la boda y en Zankyou os lo recordamos una y otra vez… No es que seamos unas pesadas, es que os recomendamos un buen profesional porque pasado el gran día será él o ella quienes te permitan recordar una y otra vez lo maravilloso de esos momentos.
Hoy queremos presentaros el trabajo de dos profesionales del mundo de la imagen. Este shooting fue hecho por Patricia Grande Photography y Carlos Aragón Fotografía. Se trata de dos estudios que si ya de por sí solos crean magia, cuando se unen es como si se alinearan los astros… ¿No os lo creéis? Pues, ¡disfrutad con su trabajo!
“Hicimos esta sesión con la intención de dar ideas e inspirar a las futuras novias. Además, nos apetecía trabajar en conjunto para experimentar y nutrirnos de diferentes formas de trabajar”, explica Patricia acerca de su trabajo con Carlos y Patricia, la segunda fotógrafa de Carlos Aragón Fotografía.
Con ella tenían un claro objetivo: transmitir al público un estilo diferente que mezcla varios de ellos, como el romántico, el desenfadado, le rústico y el atrevido. Todo ello siempre enfocado a novias que buscan algo diferente de acuerdo con las nuevas tendencias.
Todos los vestidos de esta sesión están firmado con el nombre de Otaduy, una firma catalana cuyos diseños se confeccionan artesanalmente en su taller de Barcelona. “Cada uno de ellos implica un gran ritual: dibujar, preparar el patrón, medir, rasgar el tejido, coser cada pieza, pasar el proceso de calidad… Un proceso minucioso que termina cuando la novia, satisfecha, se lleva el vestido”, explican.
En definitiva, se trata de un trabajo por y para mujeres que se lleva a cabo con manos expertas, mucho amor y cuidando cada detalle, un proceso que culmina con una pieza con un carácter único e irreemplazable.
Los zapatos, con un toque singular, pertenecen a Rocío Mozo, una marca de calzado español femenino de referencia en la que se dan cita el diseño y creatividad, la exclusividad y la comodidad. Trabajan con materiales de primera calidad, tejidos y adornos exclusivos y pieles muy seleccionadas que transmiten un estilo fresco, nuevo y sofisticado.
Para los ramos y la decoración floral confiaron en L’Atelier de las Flores, cuyo diseñador realiza viajes frecuentes a Holanda y Francia para seguir las tendencias del arte floral mas actual y buscar nuevas variedades de flores. Realizan diseño floral exclusivo para eventos especiales con decoración de bodas, ramos de novia, banquete, iglesias, bodegones, bouquet planner…
El estilo, que mezcla varios de ellos en esta sesión, fue elegido a conciencia, ya que es cómodo, divertido y, a la vez, muy elegante para unos momentos tan especiales en la vida de cualquier mujer.
Además, todos los profesionales que han participado valoran como muy positiva la experiencia porque han podido conocer de primera mano el trabajo de cada uno de ellos más de cerca.
Para el MUAH (maquillaje y peluquería) apostaron por dos grandes profesionales: Natascha Lefebvre, que dio a las novias un toque natural y además atrevido en cuanto a los maquillajes, y por otro lado en Nuar Multiespacio, para los peinados de cada una de las novias, siempre siguiendo las tendencias de 2017. ¡Unas novias inolvidables en todos los sentidos!
Destaca de la sesión el uso de tocados en novias. Estos son de Rita Von, confeccionados por Cecilia y Andrea, las cuales dicen que la firma nació una tarde de retales, botones, tijeras, ilusión, creatividad y ganas improvisadas de hacer algo especial.
Inspiran cada trabajo en los materiales, en sus formas y colores. En colaboración con sus novias crean tocados siempre únicos y diferentes: casquetes, plumas, cintas, flores, boinitas, tules y pamelas…
El lugar elegido fue la Finca Aal Cachucho, espacio de diseño que destaca por sus vistas infinitas y por sus espacios con encanto como el estanque cubierto de nenúfares y el patio de rosas.
Por último, si te ha gustado esta sesión puedes inspirarte con otras como: la Bella y la Bestia, Feeling Wonderful o el shooting que mezcla el granate, el blanco y el verde.
Foto: Carlos Aragón Fotografía y Patricia Grande Photography | Producción: Carlos Aragón, Patricia Grande y Patricia Fuertes | Modelo: Cristina Bravo | Vestidos de novia: Otaduy | Tocados: Rita Von | Maquillaje: Natascha Lefebvre | Peluquería: Nuar Multiespacio | Zapatos: Rocío Mozo | Ramos: L’Atelier de las Flores | Localización: Finca Aal Cachucho
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