Existen tantos estilos de bodas como parejas en el mundo, y es que cada una tiene un encanto particular. Isabel y Pablo son de esas parejas especiales y sencillas que no necesitan gritar su amor a los cuatro vientos para sentir que son muy afortunados por tenerse mutuamente. Se conocieron hace muchos años gracias a una amiga en común y después de algún tiempo de conocerse decidieron salir como amigos, sin sospechar que un buen día unirían sus vidas para siempre.
La pedida de mano fue tan íntima y discreta como romántica. En la intimidad de una mesa, casi a escondidas y aprovechando la oscuridad de un rincón, entre el plato de postre apareció por sorpresa una caja con un gran lazo verde oscuro de Diamonds. La cajita se abrió como una flor y apareció el anillo. No hubo muchas palabras, fue un momento reservado para los dos, seguido de un emocionante “¡sí!”.
Tras ello, se pusieron manos a la obra con la organización. Lo primero era elegir a alguien que le ayudara en todo el proceso, no tuvieron ninguna duda: Momentous. El lugar elegido para celebrar el amor de esta pareja fue La Ermita de los Llanos, Arenas de San Pedro, Ávila. El 11 de julio de 2015, arropados por todas las personas que les quieren, Isabel y Pablo dieron el gran paso, prometiéndose caminar juntos por siempre.
Los novios
Isabel lucía preciosa con un modelo de inspiración vintage de Aire Barcelona, la peineta en plata viejo y los pendientes de El Corte Inglés realzaban con notoriedad el estilo elegido. Los zapatos, del mallorquín Mascaró, eran un sencillo diseño en raso blanco roto, con un delicado lazo que evocaba a los años veinte. El romántico ramo de la novia, confeccionados por Las Flores Mum, se conformaba de rosas lilas, rosas beige y eustomas. Para el maquillaje y peinado Isabel tenía muy claro que quería un look versátil que le aportara seguridad y comodidad. Los encargados fueron One Life Estilistas, quienes eligieron un recogido romántico que favoreció sus facciones.
Pablo se veía guapísimo con el traje de Giovani. Tanto el chaleco y la corbata en tonos plata como el prendido en la solapa y su radiante sonrisa dieron la nota de color a su look nupcial. Las alianzas de los novios eran de la firma Argyor. Estaban hechos en oro blanco y amarillo y fueron grabadas con la frase “siempre juntos”. El anillo de pedida, creado por Diamonds, era de oro blanco y tenía un pequeño diamante, un detalle que simbolizaba la sencillez que caracteriza a esta pareja.
La ceremonia
Para inmortalizar cada momento de este gran día, eligieron a Héctor Sastre, de f8studio. Él supo plasmar con aire fresco y juvenil lo que esta pareja buscaba. “Un estilo propio que no deja indiferente a nadie por sencillez y estilo”, comentan los agradecidos novios.
Para crear una atmósfera perfectamente romántica y fiel al estilo de esta pareja, Isabel y Pablo decidieron confiar la decoración de la boda a Carmen, de Momentous, ella fue la wedding planner encargada de realzar la belleza de cada espacio, en colaboración con la floristería Don Zoilo. Juntos crearon espacios mágicos. Entre los más aplaudidos están los centros de mesa con jaulas de pájaro estilo vintage, que no dejaron indiferente a ningún asistente.
En general, toda la decoración floral fue el resultado del trabajo creativo de Momentous. Este maravilloso equipo supo entender desde un principio lo que los novios buscaban, brindándoles una asesoría integral de forma muy personalizada, algo que sin duda es la clave para que un evento de esta envergadura se convierta en una experiencia inolvidable, tanto para los novios como para sus invitados.
El banquete
B&D Catering fue el equipo encargado de conquistar el paladar de los 70 invitados de esta boda tan íntima. Carmen, de Momentous, diseñó dos pequeños puestos de madera a la entrada de la ermita. Uno para los regalos y otro para un puesto de bebidas de limonada, un detalle que los invitados agradecieron ya que les permitió aplacar el calor de ese cálido día de julio.
Posteriormente, se ofreció un cóctel de varios entrantes y a la hora de la cena los comensales pudieron disfrutar de un primero de milhojas de manzana caramelizada con foie y rulo de cabra. De segundo se sirvió lubina en cama de verduras al toque de soja, cortante de mojito hecho a la manera tradicional y, por último, solomillo de carne de Ávila asado a la húngara. Como postre cobró protagonismo la tarta de crema de queso con arándanos y helado. Por si fuera poco, los novios contrataron una mesa dulce con mini helados y todos los invitados disfrutaron como niños.
La romántica decoración también estuvo presente en la zona del banquete. El toque perfecto lo dieron los manteles blancos y los originales centros de mesa diseñados por Momentous y Don Zoilo. Además, una carpa blanca con lámparas de hierro adornaba la zona de cena.
Baile de los novios
Isabel y Pablo son discretos y sencillos, pero estaban ansiosos por compartir una coreografía especial con sus invitados. Para abrir la pista de baile eligieron el divertido swing de los años 30 Sing, sing, sing, de Benny Goodman. Dispuestos a darlo todo tomaron clases en Dance Sport Center, una escuela de baile en la que Miriam, su coreógrafa, les dio las lecciones necesarias para que en tan solo en 4 clases pudieran lucir como unos verdaderos expertos.
Tras la preciosa coreografía los invitados disfrutaron de una fiesta maravillosa, en la que los protagonistas fueron el amor, la felicidad y las miradas cómplices de los novios. Algo que Isabel resume como “una boda divertida e íntima. La boda que siempre soñé”. ¡Enhorabuena a esta pareja tan especial, les deseamos toda una vida llena de amor y alegría!
Wedding planner: Momentous | Lugar de celebración: La Ermita de los Llanos | Vestido de novia: Aire Barcelona | Traje de novio: Giovani | Complementos de novia: Diamonds y Argyor | Floristería: Don Zoilo | Catering: B&D Catering | Fotógrafo: f8studio | Maquillaje y peluquería: One life estilistas
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