El 2015 es un año lleno de combinaciones, de mezclas y donde tienen cabida todas aquellas parejas que quieren arriesgar con la decoración de su boda. Da igual si el gran día se celebra de día o de tarde, lo primordial es sorprender. ¿Sois vosotros así?
Ya sabemos que Pantone eligió como color del año el Marsala, un tono entre granate y rojo, que se ha convertido en un referente a nivel mundial y que irradia pasión además de elegancia. Podrás añadirlo a cualquier detalle de la decoración floral, en los vestidos de tus damas de honor, en la mantelería o incluso en partes de tu maquillaje como en los labios o en las uñas.
Turquesa + blanco
Si tu boda es de las que se celebran por la tarde noche, al aire libre y/o en la playa puedes apostar por una combinación de lo más bonita: turquesa y blanco. Este último color será el que predomine para no perder la elegancia de un día tan importante y además añadiendo algunos objetos (sillas, botellas, servilletas…) con el tono turquesa permitirás alegrar y distinguir diferentes zonas o aspectos del gran día.
Amarillo + verde
El amarillo dicen que en teatro da mala suerte, pero nadie dijo que en las bodas fuera así. Se trata de un color que alegra cualquier espacio. Sí, es arriesgado, lo reconocemos, pero es una forma de hacer partícipe a la decoración de la alegría que estaréis viviendo, ya que es un color con mucha fuerza, personalidad y atrevimiento. Las flores, las copas, los centros de mesa… ¡arriesga y gana! Y para suavizarlo puedes utilizar el verde, un tono que apacigua y que además combina perfectamente con las flores y otros elementos.
Morado + plata
El azul klein es otro de los colores más de moda en los últimos tiempos, además de identificarse a lo largo de la historia con la realeza. Él junto con sus derivados, como el morado, pueden ser el color que estáis buscando para la decoración de vuestra boda. Si además a ello se le suman detalles plateados el efecto quedará aún más sofisticado y bonito. La tarta puede contener flores en este color y ser sencilla a la vez y como no puede ser de otra forma los jarrones de los centros de mesa podrían ser plateados y DIY.
Blanco + negro
Es cierto que hace un tiempo era impensable unir estos dos colores y utilizarlos de forma conjunta para decorar los espacios de una boda. Sin embargo, ese pensamiento ha dado la vuelta y ahora puede ser una de las mezclas más elegantes que existen. Por ejemplo en la cultura asiática ambos forman el símbolo del Yin y el Yang: dos fuerzas opuestas y, a la vez, complementarias, que se encuentran en todas las cosas. De esta combinación resulta un estilo enigmático y novelesco.
Además, al ser colores tan básicos encontraréis todo tipo de accesorios para usar. Desde las vajillas o los manteles hasta complementos para tu vestido, pasando por el traje del novio, claro.
A pesar de todo lo anterior, el lugar de celebración que elijáis será el que decida o, al menos, os aproxime al estilo de boda que queréis celebrar. Puedes fijarte en la gama de colores que ya hay en el lugar, las texturas, las flores o edificios que lo conforman… En cualquier caso, tus invitados quedarán gratamente sorprendidos. Ya sabes lo que dice el dicho: “quien no arriesga, no gana”.
Además, te recomendamos conocer cuáles son las tendencias de boda para el próximo 2016 o tendencias para triunfar con tu vestido de novia el próximo año.
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