Seguramente tu amiga, aquella que se casa próximamente, tiene una lista de deseos para estas fiestas muy parecida a esta, así que, si no sabes qué regalarle de cara a la boda, ¿por qué no apuestas por alguna de estas opciones? ¡Seguro que la sorprenderás!
En primer lugar, al margen del vestido y los zapatos, hay complementos que lucirá el día de la boda y en los que tendrá que invertir, y uno que sí o sí es un denominador común en cualquier novia son los pendientes. Normalmente, los más buscados son piezas de joyería en oro y brillantes.
Si ella es más de arriesgar le gustará seguir la tendencia. Insectos y oro amarillo es la combinación estrella de la temporada, ya sea en forma de pendientes, collares, anillos o brazaletes. Si no puedes ir con la afortunada que recibirá el presente para que se prueba no te arriesgues con un anillo, ya que difícilmente acertarás con la talla.
Por otro lado, si hay algo que la novia prepare con igual o más ilusión que la boda, es su nuevo hogar conyugal, en el que la cocina jugará un papel fundamental. Junto a los fogones tienen lugar grandes momentos de la vida familiar, pero es verdad que el mundo culinario suele ser un misterio en la mayoría de los casos. Entre el poco tiempo que nos queda entre el trabajo y el resto de obligaciones acabamos tirando de take away, pero lo cierto es que hay una diferencia sustancial entre la comida a domicilio y el home made, y para ello hay numerosos manuales de supervivencia.
Pero para cocinar como Dios manda hay que equiparse con todo lo necesario. Utensilios de cocina varios, electrodomésticos… Y, en concreto, algunos que les salvarán alguna cena de última hora con invitados: raclette, plancha, fondeu, una freidora sin aceite, Thermomix…
Y si la cocina es escenario de grandes momentos, entorno a la mesa es donde se estrechan lazos y todo lo que inviertan en decorarla y hacer del comedor un lugar agradable cuidado al detalle jugará siempre a favor de los que se sienten en ella. Empezando siempre por una bonita vajilla, una original cristalería y cubertería y, por supuesto, si puedes hacerte con una mantelería con iniciales de los novios grabadas, has triunfado.
Otra idea fantástica sería regalarle un buen set de tazas de desayuno. Es hora de desterrar la taza souvenir que nos trajeron hace años de Ámsterdam y sustituirla por un juego de tazas grandes pero con estilo en las que tomar el café con leche.
Renovar el repertorio lencero de nuestro armario sigue siendo tradición cuando nos casamos. Camisones, bata, ropa interior… es una inversión considerable si queremos apostar por calidad y buen gusto, y toda ayuda a la hora de hacernos con una buena colección de lencería vendrá bien.
Evidentemente todo lo detallado anteriormente compone una lista de deseos materiales, pero lo más importante que una novia pedirá al nuevo año será absolutamente intangible.
Además que que todo vaya bien el “día D”, la novia del año pide por una vida larga al lado de la persona con la que ha decidido compartir cada uno de los momentos que transcurrirán en ella. Paciencia para sobrellevar los defectos del otro, caridad para perdonarlos, optimismo para los momentos difíciles, diligencia para las decisiones importantes, lealtad y fidelidad al compromiso contraído y mucho amor y cariño para cuando todo lo demás falle.
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