Marta y Daniel se conocieron en Zaragoza, ¡pero fue en Madrid donde surgió el amor…! Después de una bonita relación, decidieron comprometerse, nada más y nada menos que en Japón, en el Abismo de Kanmangafuchi. ¿Quieres saber cómo fue su gran día?
Los novios
La boda se celebró el 1 de mayo de 2016 en la Villa Santa Ana (Zaragoza), un lugar especial para un celebrar un día inolvidable. La novia lucía un vestido espectacular que ella misma diseñó, ¡toda una artista!
Complementó su look con unos pendientes antiguos de su madre, unos zapatos a medida de Emilio Badiola en color turquesa y un ramo de novia impresionante. “Desde el primer momento quise que fueran margaritas, algo sencillo. La chica del vivero, Noelia, lo bordó, no lo pudo hacer más bonito y mejor acabado al igual que la corona natural de flores que llevé, obra suya”, comenta Marta. En cuanto al maquillaje y al peinado, fueron perfectos. De ello se encargaron Raquel Arcusa y Miriam Maurel, respectivamente.
Por otro lado, Dani, confió en la Sastrería Luis Javier Montoya y escogió un traje de novio muy elegante que combinó con una pajarita azul, unos gemelos y unos zapatos de Silbon.
La ceremonia
El “sí, quiero”, como era de esperar, estuvo lleno de momentos especiales. Familiares, amigos y novios disfrutaron de una ceremonia de lo más emotiva capturada por Fotocracia en preciosas instantáneas. “¡El fotógrafo de 10! No sólo por la calidad de las fotos, que por supuesto también, sino porque además es encantador”, confiesan los novios, que están encantados con el álbum de boda personalizado que Estudio Ductus creó para ellos.
El banquete
La novia explica que ella misma se encargó de preparar toda la decoración de la boda: detalles para invitados, polaroid gigante, kits anti resaca, carteles con mensajes, pegatinas, sombreros, libro de firmas, etc. “Me gustan mucho las manualidades y la decoración, así que, los meses de antes disfruté muchísimo preparando todo y Love Story me ayudaron a montar cada espacio en la finca. Son un encanto y muy profesionales. Sin duda, un acierto”, apunta Marta.
¡La comida fue deliciosa! De ello se encargó Maher Catering, del que los novios sólo tienen buenas palabras. Los invitados quedaron muy satisfechos y disfrutaron de cada momento del banquete.
Baile de los novios
Llegado el momento del baile, Marta y Dani decidieron sorprender. “Nos gusta mucho viajar y hace unos años fuimos a la India. Inicialmente pensamos en no hacer baile, ya que las canciones lentas y arrimadas no son lo nuestro, pero un día mientras preparábamos la música de la boda nos acordamos de ese viaje y de una canción que marcó nuestra estancia allí. Y, al final, el baile nupcial quedó muy divertido”, explican.
Los novios recuerdan su boda como un día lleno de felicidad, alegría, diversión y complicidad. ¡Enhorabuena pareja!
Si te ha gustado esta boda, no te pierdas la de Carlos y Aitana o la de Paloma y Pablo.
Lugar de celebración: Villa Santa Ana | Maquillaje: Raquel Arcusa | Traje de novio: Sastrería Luis Javier Montoya | Zapatos de novio: Silbon | Fotografía: Fotocracia | Álbum personalizado: Estudio Ductus | Wedding planner: Love Story | Catering: Maher Catering
Selecciona a los proveedores que quieres contactar
¿No te quieres perder las últimas novedades para tu boda?
Suscríbete a nuestra newsletter
Escribir un comentario