Ana y Edu se conocieron trabajando, cuentan: “Nos conocimos en el verano de 2012. Yo empecé a cuidar a dos niños y Edu era el socorrista de la piscina de su urbanización. Ahí comenzó todo…”. Se descubrieron, se enamoraron, y el 8 de diciembre de 2018, seis años después, se dieron su “sí, quiero” más especial.
El lugar que escogieron para la celebración del gran día fue la Aldea Santillana. Tenían claro que querían realizar una bonita boda de invierno, por lo que no pudieron escoger mejor. Los espacios que pusieron a su disposición, tanto interiores como exteriores, eran espectaculares y de lo más románticos.
Los novios
La novia se decantó por un modelo de Rosa Clará de estilo boho “en su versión más romántica”, explica. “Se trata de un vestido que combina la delicadeza del tul plumeti con aplicaciones de encaje. El cuerpo está confeccionado con escote barco y manga larga, realizado en encaje, y da paso a una falda con un volumen sutil, ligero y que juega con la transparencia del tejido”, añade.
En cuanto a los complementos, eligió unos zapatos de terciopelo en color rosa empolvado de Just Ene, tipo salón con tiras cruzadas y tacón bañado en plata. Un modelo que Ana personalizó con los materiales que deseó.
Otro de los accesorios que lució Ana fue el ramo de novia, una preciosa composición de la Floristería Rasgos. Era un bouquet de tallo semilargo compuesto por hipercum, bouvardia, fresia, detalle de paniculata y su flor principal, astilbe, con distintos tipos de verdes. A juego con el ramo llevó el tocado en flor de fresia que se colocó en el recogido. Ana llevó unos pendientes de oro blanco y diamantes de Suárez, que le regaló su madre, y el anillo de la pedida de mano, también en oro blanco y tira de diamantes.
Edu, por su parte, se decantó por la firma Sagaz para su traje de novio. Escogió un semichaqué con levita media en gris perla, chaleco blanco hueso y corbata en la gama de rosas, malvas y grises. Los zapatos con los que combino el modelo eran negros y de piel. Como complementos lució unos gemelos con forma de faro, simbolizando la pedida de mano que fue al atardecer en un faro de las Islas Cíes.
La ceremonia
Celebraron una emotiva ceremonia religiosa en la que Momem Fotografía capturó cada instante para el recuerdo de los novios. Sus fotos, con un estilo natural y elegante, confeccionan ya un álbum del que los novios no pueden sentirse más orgullosos, un álbum que cuenta la historia de su gran día.
El banquete
La decoración del lugar fue obra del maravilloso y profesional equipo de Aldea Santillana. Todos disfrutaron al máximo durante el banquete, gracias al menú servido y a las sorpresas que los novios habían preparado.
Baile de los novios
Llegado el momento del baile, que abrieron los novios con una preparada y divertida coreografía, todos siguieron divirtiéndose y fotografiándose con el photocall de Flashback Fotomatón.
Los novios recuerdan su boda como “un día perfecto, muy esperado, organizado al detalle con mucha ilusión y en el que salió todo como habíamos soñado o incluso mejor. Nos pareció una boda de cuento”, confiesan. ¡Enhorabuena pareja!
Fotos: Momem Fotografía | Lugar de la celebración: Aldea Santillana | Vestido de novia: Rosa Clará | Zapatos: Just Ene | Ramo de novia: Floristería Rasgos | Maquillaje: MAC | Traje del novio: Sagaz | Joyas: Joyería Suárez | Photocall: Flashback Fotomatón
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