Brunch para bodas: tips para que sea un éxito
¿Buscas algo alternativo al tradicional banquete nupcial? Apuesta por el brunch en tu boda, ¡una opción fresca y deliciosa para agasajar a tus invitados! Te contamos todo sobre este tipo de celebración.
Quizás eres de esas personas que tienen mucha energía por las mañanas y adoran el ritual de un rico y nutritivo desayuno nada más levantarse de la cama. O puede que para tu gran día busques algo diferente y fresco como alternativa al tradicional banquete y así conseguir una boda única y alejada de convencionalismos. Mientras la mayoría de las parejas se decantan por una ceremonia con recepción después del mediodía o a la hora de la cena, ¿has pensado alguna vez en una celebración que tenga lugar al final de la mañana para ofrecer a tus invitados un delicioso y original almuerzo, a medio camino entre el desayuno y la comida?
El brunch, término resultante de la unión entre las palabras inglesas breakfast y lunch, es más consistente que un desayuno pero más ligero que una comida, permite un ambiente más relajado y cordial entre los comensales y admite altas dosis de creatividad a la hora de elegir los platos. Al mismo tiempo, es en general una opción de menú más económica.
Lo primero que tienes que pensar es: ¿este tipo de boda es para nosotros? Primero piensa bien si el brunch se va a ajustar a la idea de celebración que tienes en mente y si en tu familia y entorno de amigos va a ser una elección bien recibida, ya que si son más bien tradicionales puede que esta fórmula no se ajuste a sus expectativas de calidad y cantidad y prefieran platos más copiosos o más típicos de un banquete nupcial. Aunque es vuestra boda y vosotros decidís qué queréis hacer en ella.
¿Quieres conocer algunas claves más para que tu brunch de boda sea un éxito? ¡Coge tu cuaderno de notas y apunta!
1. Dónde y cuándo se sirve un brunch
¿Dónde es posible hacer este tipo de celebraciones? En el caso de que ya tuvieras reservado el lugar de la celebración, el restaurante o la finca, asegúrate de que ofrecen este servicio, ya que los beneficios suelen ser menores que con un menú nupcial clásico. Y si tenéis claro desde el principio que queréis esto en vuestro día antes de reservar un lugar, aseguraros de que podéis hacerlo ahí en ese espacio.
Si te casas en primavera o verano, cuenta con que tu brunch lucirá de forma muy especial en un espacio al aire libre, como un jardín, un patio, la playa o la azotea de un edificio urbano, aunque las ceremonias de otoño e invierno también permiten mucho juego con la decoración, la temática y los tonos. Sea como sea, este tipo de celebración se puede adaptar a cualquier estación del año y espacio.
En cuanto al horario más recomendable en nuestro país es ofrecerlo entre las 12 y las 14 h, en forma de bufet o cóctel, aunque si buscas el ahorro, mucho mejor que te decantes por la primera modalidad, ya que no necesitaréis tantos camareros y la recepción se desarrollará de manera más dinámica y distendida. Aunque el bufet requiere que todos se levanten y se sirvan por su cuenta, es imprescindible colocar mesas y sillas, taburetes, incluso cojines en el suelo y mesas bajas para una velada tipo picnic, así cada uno puede sentarse donde más le apetezca.
2. Qué lleva el brunch ideal
Una de las preguntas que seguramente te surja es, ¿qué tiene que llevar un brunch para que sea perfecto? Pues lo cierto es que pueda parecer que al principio es poca comida, lo cierto es que no lo es porque comprende platos dulces y salados, además de ofrecer todo tipo de bebidas. Por tanto, es algo muy variado y completo y no dejará a ningún invitado con hambre. Empezamos por los salados que pueden ser: embutidos, tostas, canapés, ensaladas, jamón ibérico, verduras asadas, huevos en cualquier preparación, pasteles y tartaletas saladas, patatas fritas y asadas, salmón ahumado, salsas y toda clase de aderezos, fríos y calientes.
En cuanto a los dulces, cereales, bollería, repostería, tostadas, helados variados, confituras, mermeladas, chocolate, tortitas, crèpes, gofres, frutas frescas o presentadas de forma alternativa (macedonia o brochetas para bañar en chocolate), sin olvidar, por supuesto, vuestra tarta de boda para ofrecer después del ágape.
No debe faltar un surtido variado de pan (de semillas, rústico, cereales, frutos secos), así como una barra de zumos de frutas, café, infusiones, cocktails, lácteos (leche, quesos, yogures y mantequilla) y leches vegetales (de soja, avena, almendra), refrescos, cerveza, batidos naturales. ¿Y el alcohol? Sí, aunque la previsión de bebidas alcohólicas debe ser menor dada la naturaleza y el horario de la recepción.
Una buena idea es organizar un brunch temático o ponerle una etiqueta especial como ‘casero’, ‘vegetariano’, ‘orgánico’ o ‘ecológico’, muy de moda entre las bodas de la generación ‘millenial’, según vuestro estilo de vida o el leitmotiv de la boda. También podéis incluir puestos de comida del mundo (sushi, rincón de comida mexicana o india), barras de dulces/pasteles o carritos de comida rápida como perritos calientes, hamburguesas o chocolate con churros, ideales para imprimir una estética original al evento.
3. Decoración del brunch
La decoración de boda es una parte esencial de vuestro día y por eso siempre os aconsejamos que la cuidéis al detalle pensando qué estilo queréis que sea vuestro día, el lugar de celebración, la estación del año e incluso el momento del día. En este tipo de bodas se permite cierta libertad ya que un brunch no corresponde con una boda clásica y tradicional sino más bien con una que huye de protocolos encorsetados. Pero sí que os recomendamos que penséis qué elementos jugarán un papel importante en la decoración de vuestro brunch de boda. Detalles que ayuden a crear una atmósfera relajada y especial. Elige una vajilla bonita, atrévete combinando colores, decora con flores de temporada, elige unos manteles distintos… en definitiva, puedes apostar por algo original y diferente.
Además, puedes añadir otros elementos como un photocall, un fotomatón divertido u organizar juegos para entretener a los invitados en caso de que no haya baile o fiesta. Al igual que en las recepciones tradicionales, la música debe sonar durante el ágape para crear el ambiente que más te inspire, lo ideal es algo suave e instrumental como el jazz, bossa nova o chill out, para que no interfiera en la conversación.
Si todavía no estuvierais convencidos de celebrar vuestra boda con un brunch, os contamos algunas de las ventajas que tiene este tipo de boda. La primera de ellas es que un evento de mañana se presta a atuendos más casual y relajados, con lo que podréis vestir como os apetezca y elegir un look alternativo o vestidos de novia sencillos y económico. Además, al ser un ágape informal en que la mayor parte del tiempo estaréis de pie, tendréis muchas más oportunidades de charlar con vuestra familia y amigos. Además, será una boda muy original y con personalidad porque no son muchas las parejas que se atrevan a celebrar una boda así.
Por otro lado, las fotos de la boda serán preciosas y llenas de brillo, porque habrá más luz durante el tiempo que dure la celebración y vuestro fotógrafo no tendrá que darse prisa en captar los mejores momentos antes de que anochezca. ¡Ah! Sólo porque tu boda vaya a ser un evento de mañana o mediodía, no significa que no vaya a haber baile y diversión, encárgate de buscar un buen DJ que anime a bailar hasta al más aburrido y ¡a disfrutar de la fiesta!
Y por último, si no os atrevéis a organizar algo así siempre podéis hacer un brunch al día siguiente de vuestra boda, es una manera de despedirte bien de tus invitados más cercanos, recordar el día tan especial que vivisteis juntos y agradecerles que estén ahí.
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