Sheila y Paco se conocieron gracias a unos amigos que tenían en común cuando iban a un concierto y, fue después, cuando surgió el amor. Fueron años más tarde, en Roma, donde tuvo lugar la pedida de mano muy diferente a las tradicionales pues fue la novia junto a la hija de ambos quien hizo la gran pregunta.
Con un bonito detalle, Sheila le dio a Paco un candado con la frase “¿Quieres casarte con nosotras?” para después cerrarlo en una farola del famoso puente del best seller Perdona si te llamo amor.
Fue una pedida diferente y original pues en ese momento ¡no hubo anillo de pedida! A pesar de ser la novia quien pidió matrimonio, el novio quiso hacer la pedida de mano tradicional aunque Sheila recuerda que “se hizo de rogar”. Paco esperó al día antes del “sí, quiero” para pedirle matrimonio delante de la familia de ambos.
Los novios
Sheila, con un estilo muy definido, apostó por el equipo de Marina Arcos Novias para juntos ponerse manos a la obra. El vestido era de crepé de seda con la espalda descubierta y acompañada de encaje guipur a juego con las mangas. En cuanto a los zapatos, la novia se decantó por unos peep toes de Menbur con plataforma en color morado a juego con la boda decorada en tonos lavanda y con su ramo de novia.
Para el ramo de novia, contó con los profesionales de Salon des Fleurs que también elaboraron su corona, los prendidos del novio, de los padres y el abuelo de la novia. El ramo tenía aires silvestres y llevaba lavanda, craspedia y eucalipto y, además, como bonito detalle llevó el anillo de compromiso de su abuela que por enfermedad no pudo asistir al evento. Los floristas de Salon des Fleurs también se ocuparon de la semicorona de Adriana, la hija de los novios.
En cuanto al maquillaje y peluquería, Sheila lo tuvo claro desde siempre, su tía, Yolanda Ponce, se dedica al sector por lo que pensó “¿quién mejor para lucir perfecta en mi gran día?”, era evidente.
Sheila lució unos sencillos pendientes de Vidal&Vidal, regalo de sus padres, en oro blanco con un brillante en el centro, además del anillo de compromiso también de oro blanco con diamante. Para las alianzas utilizaron las mismas que se regalaron años atrás, simplemente grabaron las nuevas fechas y las pulieron. Para ellos tenía un simbolismo especial, “aquello que empezó y permanece” explican.
Paco se decantó para el día más importante de su vida por el diseñador Juan Moreno que le confeccionó su traje a medida y también llevó un bonito reloj Guess.
La ceremonia y el banquete
Los novios se casaron y celebraron el banquete en el Palacio de Hoyuelos el 2 de julio de 2016 en una boda muy familiar ya que disfrutaron del lugar durante todo el fin de semana con sus seres más queridos. Sheila y Paco tuvieron claro que no querían limitar a sus invitados a hablar con unos u otros por lo que optaron por una boda tipo cóctel y se decidieron por los profesionales del catering Eneldo Catering que constó de 16 aperitivos, un bodegón de quesos artesanos, buffet de carne y pescado y, por supuesto, ¡también de postres!
De toda la decoración se encargaron las profesionales de Rafia by Natire y los novios recuerdan que “fue un trabajo excelente”. Tuvieron un detalle muy original y especial ya que colocaron fotografías en las columnas que daban forma al altar. Sheila y Paco recuerda que se preocuparon de mimar todos los detalles de cada uno de los rincones de la finca, así como un espacio para ponerse cubretacones, un rincón para estampar la huella y dejar un mensaje en una cápsula del tiempo…¡y hasta el candy bar!
Para agradecer a los invitados que compartieran el día más feliz de sus vidas, les regalaron unos tarros de mermelada casera que realizó Deliccioso con frutas y hortalizas de temporada. Además, durante el baile los asistentes pudieron hacerse con una nariz de payaso que les proporcionó la Fundación Theodora por haberles realizado una donación para que “puedan continuar con su gran labor y llevar sonrisas a los hospitales” recuerdan los novios. ¡Para los más pequeños también hubo detalles! Cada uno tuvo unas pizarras enrollables que hizo la madre de la novia, un cuento acorde a su edad, mini máquinas de lacasitos, pinturas y libretas para usarlas… ¡estuvieron súper entretenidos!
Para inmortalizar el día más especial de sus vidas decidieron contar con Lucía Romero porque querían un profesional que supiese “captar cada instante, sin posados y que capturase las emociones y los sentimientos” explican los novios. Además, recuerdan que el resultado final fue lo que esperaban ya que “las fotografías plasman la naturalidad, la cercanía y el sentimiento en cada momento”.
Baile de los novios
Para su primer baile de casados decidieron que no querían el tradicional vals ni cualquier canción al uso, se decantaron por Puestos a pedir de Diego Martín, una canción con la que se sienten identificados desde hace años. ¡Un momento súper romántico y emotivo! Además, los novios lo tienen claro si volviesen a casarse mañana lo harían exactamente igual porque recuerdan que pasaron un fin de semana único que jamás olvidarán.
Lugar de celebración: Palacio de Hoyuelos | Vestido de novia: Marina Arcos Atelier | Traje de novio: Juan Moreno | Zapatos: Menbur| Floristería: Salon des Fleurs | Decoración: Rafia by Natire | Fotógrafo: Lucía Romero | Maquillaje y peluquería: Yolanda Ponce | Detalles para invitados: Fundación Theodora | Catering: Eneldo Catering |
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