Todo te lo ponen fácil al principio, cuando vas a contratar, nos sentimos seguros y que estábamos en buenas manos, hasta que llegó el día de la boda y nos la jugaron Contratamos barriles, recalco, barriles de cerveza Estrella de Galicia y nos hicieron la perrada de llevar neveras (de la playa) llenas de litros y latas de cerveza de marcas que venden en Lidl. Cuando vimos eso mi marido y yo, la manera en que detrás de la barra se escondieron y llenaban las jarras de cristal con las litronas y latas, nos quedamos helados. No podíamos creer lo que estábamos viendo. Lo peor y menos profesional que yo me he encontrado nunca y hablamos de que pagamos 150€ por cubierto, hablamos que tienen fama de ser de los mejores de Almería.. Para nosotros fue sentirnos estafados y no entendíamos qué ganaban con esa cutrada. Por no estropear el momento y que nuestros invitados se dieran cuenta, decidimos no liarla pero llegó el día de hacer el pago restante y quedamos con Bonillo, el dueño. No sabía ni cómo justificarse, no hubo ninguna disculpa, es más, le costó hasta reconocerlo! Qué cinismo por dios, aún lo pienso y me entristece. Ni un céntimo nos quitó de ese último pago, cosa que al menos hubiera sido un gesto después de lo mal que lo pasamos por aquello. Jugó con nuestra confianza, ilusión, el dinero que tanto trabajo nos costó ahorrar… nos sentimos muy engañados. Ojalá pudiera escribir otra experiencia, pero eso fue lo peor de mi boda. No lo podría recomendar aunque quisiera. El que haga un evento sabe todo lo que eso conlleva y el que hagan estas cosas para dios sabe qué, porque dime qué ahorran con hacer eso en lugar de poner lo que te han contratado y estás pagando.. Seguimos sin tener claro qué pasó, si fue algún contratiempo o algo, porque el dueño jamás nos dio una explicación. Por ello profesionalidad 0, más bien listillos aprovechados.