En La Manga y a orillas del Mar Menor, rodeado de un paisaje privilegiado y a escasos kilómetros del pueblo pesquero de Cabo de Palos, se encuentra el Restaurante El Parador del Mar Menor. En una antigua finca rústica de 2.000 metros cuadrados. Este restaurante se aleja del mundanal ruido y acoje a sus visitantes ofreciéndoles un paraíso de paz y descanso. Sin duda, un entorno mágico para la celebración de vuestro "sí, quiero".
Un entorno único donde disfrutar de su cuidada gastronomía. Comer o cenar en un elegante y acogedor salón-restaurante frente al mar. El Restaurante El Parador del Mar Menor cuenta con un amplio salón de celebraciones para acoger banquetes y eventos de cualquier magnitud y una espectacular terraza-chill out donde relajarse, tomar una copa y escuchar música en directo.
Su equipo de profesionales estará siempre a vuestra disposición para crear un evento inolvidable, personalizando cada detalle y ofreciendo su asesoramiento.
Teníamos previsto celebrar nuestra boda allí el 3 de julio. Debido a la pandemia y que vivimos en otra comunidad, el poco contacto fue telefónico, ya que apenas nos informaban de nada. Éramos nosotros los que teníamos que escribir siempre, y en ningún momento nos informaron de las restricciones. Al acabar el estado de alarma, fuimos a la prueba de menú (a 6 semanas de la boda) y nos encontramos con la desagradable sorpresa de que ellos tenían sus propias normas para la celebración, que consistían en hacer un menú degustación en el que no cabía la posibilidad de hacer dos ambientes para cóctel y copas en mesas altas. Dichas normas eran impuestas por El Parador, a pesar de que no había limitación por la Región de Murcia. Se mostraron en todo momento poco flexibles a cualquier cosa que se saliera de su propuesta, además tuvieron un trato personal desagradable, autoritario y carente de empatía. Durante esa semana intentamos contactar de nuevo para resolver el tema, sin obtener respuesta, por lo que decidimos cambiar de sitio de celebración, dado que no nos daban ninguna confianza, a pesar del estrés que esto supuso para nosotros. Cuando intentamos razonar con Teresa la posible devolución de una parte de la fianza, su única respuesta fue que ella tenía que ceñirse al contrato firmado, mostrando una actitud fría y desafiante. Podríamos escribir muchas más sensaciones negativas que tuvimos con este sitio, y realmente me extrañan los comentarios que hacen alusión a su flexibilidad. En nuestro caso, la falta de transparencia, comunicación y empatía fueron determinantes para cambiar de sitio. Creemos que con esa política no se puede llegar muy lejos.
Que podemos decir, si un mes más tarde de nuestra boda seguimos sin palabras. Gracias a Itziar, Ana, Antonio, Manolo, Alex, Teresa y todo el equipo que forma parte del Parador del Mar Menor por hacer MAGIA. Cuando las cosas se hacen desde el corazón a la orilla del mejor atardecer del Mar Menor, no hace falta nada más. Gracias a todos y a cada uno de vosotros por haber hecho de nuestra boda el día más bonito de nuestra vida. Estaremos eternamente agradecidos ️