Rosa Clará transmite ilusión y crea un entorno mágico en el que se envuelve la belleza, la elegancia y un estilo único. La mujer vestida por Rosa Clará es un nuevo perfil de novia; mujeres que están plenamente incorporadas al mundo laboral y con una gran sensibilidad por la moda, y que quieren casarse con un vestido especial que las haga sentirse únicas y que plasme su propia personalidad. Quieren un vestido de novia con magia, que deslumbren y las haga sentir maravillosas. Este año, la diseñadora Rosa Clará vuelve a crear una colección sorprendente, elegante y distinguida para la novia que busque realzar su figura, quiera sorprender y por encima de todo, sentirse única.
Podéis encontrar todos los vestidos en cinco líneas distintas: Rosa Clará Couture, Rosa Clará, Rosa Clará Gatsby, Rosa Clará Soft y Rosa Clará Boheme.
Experiencia estupenda y buena profesionalidad , especialmente en su taller de Velázquez y la persona de su modista Encarnita.
muy recomendable
MJA
Tuve que ir 7 veces a hacerme arreglos y al final no quedó bien, a pocas horas antes de mi boda arreglando el vestido con todo el estrés. Las modistas dejan mucho que desear, de tanto subir el vestido el escote de la espalda ya no hacía el mismo efecto y las mangas llenas de arrugas. A pesar de hablar con la directora general ni si quiera tuvieron la amabilidad de no cobrarme el desastre de mangas. No lo recomiendo y no es aceptable en una casa de esta reputación y precio.
Contar con Rosa Clará Velázquez para el vestido de mi boda fue todo un acierto. Había ido a probarme vestidos en un par de firmas más y no conseguía decidirme por ninguno porque todos me gustaban. Pedí cita en esta tienda de casualidad y no pude tener más suerte. Me atendió una chica llamada Sabela, en seguida captó mis gustos y me sacó varios vestidos, entre ellos… EL VESTIDO. La atención de Sabela fue tan buena, que finalmente fueron tanto mi madre, como mi suegra y terminaron comprándose el vestido allí.
En cuanto a la primera prueba, tuvimos tan mala suerte que apareció el COVID19 y su confinamiento. Como aún estábamos confinados me cambiaron la cita sin problema y finalmente tuvimos que ir durante las fases de desescalada con justificante previo. Aprovecho también para hablar de Encarni, la modista, que estuvo atenta a todo lo que le pedíamos en todo momento, haciéndonos los arreglos necesarios y con una profesionalidad absoluta.
No he dejado de recibir elogios por parte de la gente sobre mi vestido, tanto el propio día de la boda como posteriormente al ver las fotografías. Para mí, pese a ser un corte princesa, no me resultó pesado y fue cómodo en todo momento.
Por último decir que Sabela es una persona totalmente cercana, sincera y muy trabajadora, se nota que le gusta lo que hace y que disfruta con su trabajo.
¡Gracias por todo!