Montealvar es una finca en pleno corazón del bosque de Valdenazar en la que podréis celebrar la boda con la que siempre habíais soñado. El marco natural incomparable que os ofrece este lugar con vistas al campo de golf y un bosque de encinas, robles y castaños convertirá vuestra boda en algo muy especial.
Todos los espacios han sido rehabilitados por completo en el año 2020, por lo que disfrutareis de unos salones actuales, luminosos, románticos y llenos de belleza.
Espacios y capacidades
La terraza acristalada de la finca y los jardines del Monasterio del siglo XVI son espacios al aire libre con dos ambientes distintos. En la terraza encontraréis unas inmejorables vistas al campo de golf donde disfrutar de una puesta de sol que dejará maravillados a vuestros invitados.
En los jardines, un espacio adaptado para cualquier tipo de celebraciones podréis realizar el cocktail, la cena o la fiesta, ya que puede albergar hasta 200 comensales en mesa y 250 comensales para las opciones tipo cocktail. Este espacio, decorado con flores, guirnaldas y luces, le dará un aire romántico y muy acogedor.
En espacios interiores, dispondréis de distintos espacios para albergar eventos desde 60 hasta 270 comensales.
Además, si lo deseáis podréis celebrar una íntima ceremonia civil en nuestro monasterio del S.XVI, o en el propio campo de golf, y continuar con un cocktail o cena en los jardines del monasterio.
Servicios que ofrece
Los profesionales de Montealvar están especializados en todo tipo de eventos y cuentan con una dilatada experiencia de doce años en el sector. Os brindarán un servicio de calidad y os proporcionará todo lo que necesitéis para que vuestra boda resulte un éxito.
Gastronomía
El equipo de cocina de Montealvar está especializado en realizar banquetes elaborando platos selectos entre la cocina tradicional y creativa. En todas las elaboraciones se cuida la presentación y se escoge la mejor materia prima para que disfrutéis de la mejor oferta gastronómica.
Estamos encantados con nuestra boda en Montealvar en junio de este año. El sitio es precioso, tantos la zona de los campos de golf, como el monasterio y los jardines y también los salones. Fue boda de tarde y la puesta de sol con las vistas al campo de golf en mitad del campo es una maravilla.
Respecto a la organización, fue todo estupendo, se encargó de todo Isabel, que además de ser encantadora es una gran profesional que nos ofreció muchísima tranquilidad desde el día que la conocimos. Se adaptó sin problema a nuestras preferencias pero cuando era necesario nos daba su opinión y nos asesoró muy bien.
El cóctel y la cena estuvieron muy bien, lo que mas gustó fue el bacalao al pil pil. El servicio fue muy profesional y atento.
Hicimos la ceremonia civil en el campo de golf, era la primera vez que se hacía ahí y fue muy bonito. Pusimos una barra de cervezas variadas para la previa a la ceremonia que tuvo muchísimo éxito.
Después subimos al cóctel que era en el porche con las vistas, fue motivo de múltiples fotos entre los invitados.
La cena fue en los jardines tras el monasterio y la fiesta de nuevo en la zona del porche, donde antes del DJ pusimos un grupo de música en directo. La barra libre funcionó muy bien, no se formaban colas largas en ningún momento.
No pudimos disfrutarlo porque les quedaba un poco por construir, pero estaban preparando bungalows para poder pasar allí la noche de bodas.
Me facilitaron una sala con muy buena luz natural para que viniera la maquilladora a arreglarme en el propio monasterio.
La relación calidad precio es fantástica y está a 40-45 min de Madrid (Av. de América) por la A2.
En resumen, la gente quedó encantada con el sitio y nosotros también, la boda salió como nosotros queríamos y lo repetiríamos 100% de nuevo con ellos.
Trato 10 desde el primer momento! Nos quedamos a comer un dia para probar su cocina y estamos deseando de que llegue el momento de hacer la prueba del menú de boda! Encantados con la gestión de Carmen