Restaurante Trinidad, lleva trabajando más de 100 años en el mundo de la hostelería , lo que nos ha convertido en uno de los lugares de eventos de referencia en la sierra madrileña.
Nos adaptamos a todo tipo de eventos , desde los más familiares hasta los que cuentan con gran número de invitados . Contamos con espacios únicos , totalmente originales , situados en un entorno privilegiado. Nuestros magníficos jardines se han convertido en el marco ideal de ceremonias, cócteles y banquetes.
Personalizamos cada evento y hacemos de cada boda algo único. Acompañamos en todo momento a los novios , desde el momento de la contratación hasta el día de la boda , poniendo nuestra experiencia a vuestro servicio .
Y , sobre todo , contamos con una excelente cocina ( no caterin ) que sirve los mejores platos .
<span;>He tardado 2 meses en escribir la reseña, pero consideraba que en frio iba a ser capaz de expresar mis sentimientos mejor que en caliente. Aquí va mi historia (es un poco larga pero merece la pena):<span;>La primera visita fue perfecta: una finca preciosa, un trato fantástico y todas nuestras peticiones tenían como respuesta un SI. "Aquí estamos para haceros la vida mas fácil" decian... Así que concertamos una cita para probar el menú y como nos gustó bastante firmamos el contrato y dimos una señal para reservar la fecha.<span;>Una vez firmado el contrato la cosa cambia: a veces no nos cogen el teléfono o no contestan a los correos, no nos pasan los contactos de algunos servicios que les pedimos (como el de peluquería), no nos enseñan algunos detalles como los muñecos de la tarta a pesar de pedírselo en repetidas ocasiones... en fin, la comunicación es un poco difícil, por lo que un día me dedico a leer reseñas y a apuntar las 'quejas' para comentarselas en una visita que pudimos concertar. Evidentemente negó todas las malas reseñas, alegando que las escribía la competencia para echarles por tierra. (Y me lo creí)<span;>Llega el día de la boda: el novio llega un rato antes de la ceremonia para ultimar preparativos y se encuentra que hay otra boda y comuniones en nuestro espacio, por lo que ni a él ni a los invitados les dejan entrar. Tienen que estar esperando más de media hora mientras Patricia discute con las personas de los eventos anteriores. Llego yo (la novia) y me dicen que tampoco puedo entrar, así que espero en el parking casi 1HORA mientras mi marido coloca las cosas de la ceremonia, ya que no estaban distribuidas como habíamos acordado.<span;>Finalmente entra el novio a la ceremonia, cuando escucho la música de su entrada, entro yo, sin consentimiento de nadie, ya que Patricia seguía discutiendo con los de la comunión anterior. El DJ un desastre, ponía las canciones súper altas y a destiempo, el micrófono no funcionaba justo en el momento de los anillos y tuvimos que repetirlo.<span;>Termina la ceremonia y los camareros traen el cóctel al jardín de la ceremonia en vez de al que teníamos acordado para el cóctel, ya que Patricia seguía sin aparecer y nadie organizaba. Yo misma tuve que mover a los invitados. Empieza la cena, algunos platos estaban fríos y, a pesar de que nos dijeron que se podía repetir tantas veces como quisiéramos, ni siquiera había platos para todos los invitados. Los camareros estaban súper desorganizados, pasaba mucho tiempo entre plato y plato (echaban la culpa a que no estaban todos los invitados sentados, cosa que en una boda es imposible). El metre bastante maleducado, no nos hacía caso porque "él lo hacia a su manera desde hace 25 años". No pusieron una mesa para los fotógrafos, y aunque la teniamos solicitada y los menús pagados, quisieron cobrarnoslos de nuevo a final porque no aparecia en su sitting plan. Durante el baile, el DJ puso canciones de hace 20 años y si le pedíamos alguna canción no la ponía. En fin... fue todo un poco caos, a<span;>unque te ofrecen servicio de wedding planner,<span;> pasamos el día organizando y discutiendo con el personal. Menos mal que contamos en todo momento con la ayuda de los fotógrafos <span;>"Diamond wedding photo & video" <span;>a los cuáles hacemos especial mención porque ellos sí fueron nuestros auténticos wedding planners.
Buenos días me casé este sábado la boda fue ya más de lo que esperaba fue de diez la comida espectacular la decoración preciosa y en todo momento me ayudaron Patrícia Manolo y todo el servicio de la finca trinidad es como sentirte en casa y estar con gente de tu misma familia lo recomiendo mil veces y volvería a casarme allí ya que me sentí muy especial Gracias por todo
maravilloso trato un acierto de boda!! Jardines muy bonitos y trato excelente.
Calidad en la comida.