Saudade Estudio se mueve por los viajes en coche con melena al viento, los helados con sabor a beso y los mapas de estrellas. Busca descubrir la esencia de todo y emociones muy intensas. Es las ganas de volver a casa, de reencontrarnos a miles de kilómetros (o en el desayuno) y los lugares donde fuimos felices. Saudade Estudio ama las puestas de sol infinitas, los selfies y las Polaroids, y celebrar cada acontecimiento importante. Cada día. Todo. Está hecho de libros antiguos y de mercadillos de segunda mano, de bailar canciones de hace años hasta el amanecer, de una copa de vino entresemana porque sí.

En Saudade Estudio se exploran sitios nuevos, sin miedo. Se ríe y se sonríe. Aquí se vive la vida apasionadamente. Los sueños. El trabajo. Esto. 

Hola, me llamo Irene y soy quien está detrás de Saudade Estudio. Mis prioridades en la fotografía son la estética y vuestra historia de amor.

Pienso en el amor como una gran colección de momentos íntimos y felices que decidís compartir con vuestros seres queridos el día de vuestra boda. El primer beso después del sí quiero, un ratito a solas antes de ir a celebrarlo con los invitados, la alegría y la fiesta que siguen.

Imagino vuestra boda como un sinfín de instantes especiales, abrazos, risas y sonrisas, besos y emociones que harán de ese día el más importante de todos. Las fotos os devolverán todo eso cada vez que las veáis. Siempre que queráis.

Me gusta creer que las fotos de vuestra boda serán el mapa que os lleve de vuelta a vuestro punto de partida; que se convertirán en el camino que os devuelva a vuestro origen; que serán vuestra historia de amor. Que seréis vosotros.