Hola, soy Manel Tamayo. Nací en Terrassa (Barcelona) e inicié mi formación estudiando Derecho en la UAB de Barcelona donde me aburrí como una ostra hasta que ingresé en el Institut d'Estudis Fotogràfics de la UPC de Barcelona. Allí descubrí la fotografía en su más amplia dimensión. Y las cámaras. Eso cambió mi vida.
Trabajé durante muchos años en el mundo de las ventas, el marketing y la publicidad pero eso tampoco me satisfacía. Un día, hace ya casi 20 años, decidí dejar todo eso y dedicarme por completo a la fotografía. Cambié el teléfono móvil, los ordenadores, los clientes y los aviones por otro teléfono, más ordenadores, otros clientes, más aviones y... mis cámaras. Me encontré a mí mismo. Soy feliz con una cámara en mi mano y adoro hacer felices a otras personas con mis fotos.
Empecé con la fotografía de viajes y eso me llevó por más de 40 países de los 5 continentes. Pero soy un inconformista y muy autoexigente. La fotografía de viajes no es tan romántica ni auténtica como parece y no hace más felices a las personas que fotografías. Y entonces descubrí la fotografía de bodas.
Y hoy me contratan para fotografiar bodas en muchos lugares. Desde masías a 5 minutos de mi casa hasta bodas en todo el mundo. Perfecto. Trabajo con cámaras en mis manos, conozco personas y lugares fascinantes y plasmo en mis fotos bodas en toda España, Italia, Francia, Grecia, Reino Unido, México, Costa Rica, EEUU y Canadá y creo que hago más felices a las personas que fotografío en una día tan bonito como es el de su boda. Eso es lo que busco. Nada más que eso. O nada menos