Más de diez años contigo: la boda de Marta y Javier
Tras más de una década juntos, Javier sorprendió a Marta con una bonita y emotiva pedida de mano en su casa. ¿Queréis saber cómo fue y ver las fotos de la boda, obra de Turandott? ¡Adelante!
Marta y Javier se conocieron en Salamanca, coincidieron en una fiesta de universidad que se organizaba en casa de una amiga que tenían en común. “Un día cualquiera y de manera totalmente inesperada”, cuenta Marta, tuvo lugar la pedida de mano. “Tras más de una década juntos, llegué a casa después del trabajo y me encontré con notas en cada puerta con palabras bonitas y el pasillo lleno de velas hasta llegar al salón. Allí me esperaba Javi, arrodillado y con un anillo en la mano”, explica la novia.
La boda se celebró el 22 de septiembre de 2018 en Salamanca. Los novios organizaron su boda con la mayor de las ilusiones, esperaban con ganas el gran día y querían pasarlo en grande, disfrutar de su amor y de los suyos en ese día que recordarían siempre. Para permitirse ganar unos recuerdos eternos, contaron con la presencia del equipo de Turandott, fotógrafos de boda de Bilbao que prepararon para ellos un reportaje de fotos precioso lleno de imágenes naturales, alegres y espontáneas, entre las que se encuentran las que os mostramos.
Los novios
La elección del fotógrafo la tuvieron clara desde el primer momento, al igual que la del vestido de novia. Marta descubrió los diseños de María Baraza y no tuvo dudas. “El vestido fue confeccionado en exclusiva con mis propias ideas en su atelier del barrio de Salamanca. El primer día que hablé con María, supo captar perfectamente mi idea y me sorprendió con un dibujo a mano alzada precioso, a partir del cuál fuimos añadiendo detalles”, confiesa.
Para la ceremonia religiosa escogió un vestido blanco en crepé y gasa, con manga de tul bordado, con escote en la espalda y el mismo encaje que las mangas. Para darle más cuerpo y volumen a la parte trasera, le añadió una sobrefalda de tul que se pudo quitar llegado el momento del banquete. Como detalle especial, la novia quiso hacerle un guiño a su madre (la cuál superó un cáncer de mama), añadiéndole detalles rosas al vestido en los botones de las mangas y en la espalda, así como un fajín con pedrería que se colocó en la segunda parte de la boda.
Y, ¿qué es un vestido sin añadirle unos bonitos zapatos? Para el calzado, Marta confió en Uniqshoes, una conocida firma que ofrece la posibilidad de personalizar los zapatos. La novia se decantó por un modelo de salón en color rosa, atados al tobillo y con tacón de glitter. ¡Sensacionales!
El ramo, por supuesto, fue otro complemento que estuvo a la altura del look que lució la gran protagonista. Se trataba de una preciosa composición de eucalipto cinerea, astilbe rosa, rosas de distintos tamaños en tonos rosado y blanco, siempreviva blanca, paniculata, bolitas de snif pride en tono rosa y astilbe en tono coral. Fue obra de la Floristería Milhojas de Salamanca.
La novia lucía perfecta, gracias también al trabajo magnífico de Olaya Martín y Lourdes Crego, en maquillaje y peinado. La novia se decantó por un estilismo muy natural con un semirrecogido con suaves ondas, donde se sujetaba el largo velo.
Emilio Yuste fue la firma que vistió al novio. Javier se enfundó en un chaqué de color azul que combinó con un chaleco gris con estampado de topos y una corbata en granate. ¡Acertada elección!
La ceremonia
La ceremonia religiosa tuvo lugar en la Catedral de Salamanca. Allí, estuvo presente Ekaitz Ceballos, de Turandott, aunque su trabajo no comenzó allí, sino en la preparación de los novios, en las que pudo inmortalizar los nervios a flor de piel que se vivieron instantes antes del “sí, quiero”. Para que todo saliera perfecto, antes de la boda, elaboraron juntos un cronograma que reflejaba dónde se vestían y a qué hora, cómo sería la llegada a la iglesia, planificaron por anticipado las fotografías de grupo, el recorrido para el reportaje fotográfico… De esta manera, los fotógrafos se aseguraron un buen trabajo y, los novios, la tranquilidad de saber que se iban cumpliendo los tiempos.
Todos disfrutaron de una ceremonia muy emotiva, en la que este profesional supo mantenerse al margen sin perder ni un solo detalle. Su punto fuerte es captar cada momento con la mayor naturalidad y discreción. Para este estudio de fotografía, un reportaje de boda consiste en “comprender vuestra sensibilidad y vuestra historia para poder captar la esencia de vuestras emociones y poder hacerlas eternas”. Los novios guardan el mejor recuerdo de Turandott: “Estamos encantados con el resultado, los elegiríamos de nuevo sin dudar”.
El banquete
Tras convertirse en marido y mujer, todos se dirigieron a disfrutar del banquete en el Castillo de Buen Amor, un lugar que les dejó impresionados, no solo por su belleza natural, sino también por la decoración floral que Milhojas preparó: rincón de bienvenida, mesa de regalos, centros de mesa… El eucalipto, las hortensias blancas y rosas, las rosas mini en tono rosado y lisianthus en blanco fueron las flores protagonistas.
Los invitados recibieron, además, detalles que los novios habían escogido para ellos, como tarritos de mermelada de cerveza, miniaturas de whisky, kits de semillas de This is Kool y alpargatas de flores para olvidarse de los tacones durante el baile.
Baile de los novios
A thousand years, de Cristina Perry, fue la canción con la que Marta y Javier abrieron el baile, y Uptown funk, de Bruno Mars, con la que lo terminaron. Tras el primer baile como matrimonio, todos los invitados se sumaron a la pista, con una larga noche por delante de la que disfrutarían sin fin.
Los novios recuerdan su boda como “el mejor día de nuestras vidas. Un día inolvidable en el que disfrutamos mucho con nuestra familia y amigos”. Ahora, tiempo después, pueden rememorar cada instante vivido gracias a su álbum de boda, en el que no faltan los momentos más importantes, aquellos más divertidos y otros más emotivos, que Turandott no dudó en capturar. ¡Enhorabuena pareja por vuestra boda y por la sabia decisión a la hora de escoger el equipo de fotógrafos!
Fotógrafo: Turandott | Lugar de celebración: Castillo de Buen Amor | Vestido de novia: María Baraza | Traje de novio: Emilio Yuste | Zapatos: Uniqshoes | Floristería: Milhojas Salamanca | Decoración: Milhojas y Castillo de Buen Amor | Catering: Castillo de Buen Amor | Videógrafo: RodaG | Maquillador: Olaya Martín | Peluquero: Lourdes Crego | Invitaciones y papelería: Limón Events Design | Detalles: This is Kool
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