Esta es la historia de un médico que contrató a una ‘criada’ para ayudarle con las tareas domésticas. El médico cayó prendado por los encantos de la joven y finalmente anunciaron su amor. La mujer se llamaba Adela, y en honor a su esposa, la finca donde habitaban tomó su nombre. Años después, los actuales dueños del espacio (ajenos a la familia de la finca) no quisieron destruir el legado, ni la bonita historia que guardaba la casa; así que, conservaron su original nombre, ‘Finca Doña Adela’, y aunque la finca se ha convertido en un lugar destinado a celebraciones y eventos, sigue conservando su esencia. ¿No sería romántico celebrar tu boda en un sitio con una historia tan entrañable como ésta? Todavía estás a tiempo.
Espacios abiertos rodeados de naturaleza
La Finca Doña Adela es abierta, con un exterior de ensueño, vegetación y árboles centenarios entre los que destaca un nogal con cientos de años. El paisaje evoca al más puro romanticismo literario; otorgándole, a su vez, un toque rústico y vintage.
A diferencia del resto de espacios de la zona, la Finca Doña Adela dispone de un salón acristalado que permite tener la sensación de estar en medio de la naturaleza. Es la única finca de la zona que permite hacer una boda de interior con estas condiciones y sin necesidad de carpas.
Su exterior idílico, su amplitud de espacio (cuenta con una capacidad máxima para 390 personas en formato banquete; para el cóctel no hay límite) y su salón acristalado ofrecen un abanico de posibilidades para diseñar una celebración de ensueño con independencia del clima. Además, está completamente preparada para personas con movilidad reducida.
Detalles que hacen una celebración única
¿Te has preguntado alguna vez qué hace diferente una celebración de otra? La respuesta es muy sencilla; el secreto está en el cuidado de los pequeños detalles. Según los profesionales de la Finca Doña Adela son tres los elementos que principalmente deben tenerse en cuenta:
La decoración es un punto muy importante; debe ser coherente con el espacio, su paraje natural y el interior del espacio. En el caso de esta finca, el estilo rústico y vintage encaja muy bien con el entorno y permite combinar diferentes materiales como madera, mimbre, farolillos y velas, flores con gran colorido como las buganvillas, lavandas, y hortensias que contrastan con el verde de sus árboles. Un sinfín de opciones para realzar, sobre todo, la belleza del lugar de celebración.
Pero, no olvides que la decoración se extiende a todos los rincones que hayáis pensado para vuestra boda, desde el cartel de bienvenida, el seating plan, la decoración de las mesas, hasta al chill-out y el espacio destinado a los regalos que entreguéis a los invitados.
Como segundo punto está la elección de la música; un elemento que definirá muy bien el estilo de vuestra boda. En espacios amplios y rodeados de naturaleza, como la Finca Doña Adela, la selección de música clásica o jazz para el momento cóctel irá muy acorde con la elegancia del lugar. Aunque esto no es todo, para que no falte la diversión, es siempre muy bueno contar con un espacio con buena acústica y mucho espacio para que todos bailen y la fiesta no pare.
Por último, la selección del catering; la cocina vanguardista, mediterránea y que se adapte a todo tipo de intolerancias está a la orden del día y esta debe ser vuestra mejor opción. Por ello, Finca Doña Adela dispone de un listado de 20 caterings de alta calidad para que podáis elegir con libertad.
Alojamiento en el lugar de celebración
Lo mejor de todo, es que el lugar de celebración os permita pasar la noche de bodas en una de sus estancias. En el caso de la Finca de Doña Adela ofrece, como regalo, la posibilidad de disfrutar de la noche de bodas en una suite independiente situada en otra zona del espacio.
Tampoco hay que olvidarse de los invitados más cercanos, en esta finca cuentan con un espacio exclusivo que puede alquilarse para 8/10 personas.
¿Bodas de mañana o de tarde?
Lo fundamental es elegir con cabeza la hora de la boda, para después no sufrir las condiciones del clima. En las bodas de verano las celebraciones de tarde-noche son las mejores compañeras y en las de invierno las celebraciones de día.
Además, el clima de Almería permite hacer una celebración en invierno sin que el frío sea un inconveniente. Aun así, en esta época el espacio se acondiciona para poder jugar con el exterior y que la boda sea perfecta.
Ya lo sabes si queréis una boda rústica, al aire libre y rodeado de plena naturaleza, todavía estáis a tiempo de reservar este lugar para la celebración de vuestra boda.
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