Continúan las semanas intensas de la moda. Con Londres y Nueva York ya en nuestras retinas, y Milán todavía en boca de todos, París cierra sus puertas con un desfile único, de los que dejan huella. Como el epicentro de las tendencias, la Semana de la Moda de París se ha llevado todos los honores.
Chanel, que contó con invitados como Pamela Anderson e Ines de la Fressange en el lujoso ‘front row’, protagonizó uno de los desfiles más impactantes por su flagrante telón de fondo. Karl Lagerfeld, director artístico de la firma, mandó construir una playa artificial bajo la bóveda del Grand Palais de París. La pared del fondo, la arena y un sistema de oleaje pusieron los ingredientes a esta rompedora apuesta en la que vimos el clásico traje de Coco Chanel (chaqueta de tweed y falda lápiz hasta las rodillas) en su vertiente más juvenil.
Louis Vuitton investigó el futuro en el patio del Louvre de París con una colección que mezcló cazadoras, minivestidos y mucho volumen en una pasarela que contó con Cate Blanchett, Alicia Vikander, Lea Seydoux y Catherine Deneuve como prestigiosas observadoras. En los Jardines de Luxemburgo de París, la marca Alexander McQueen, de la mano de Sarah Burton, exploró la combinación entre fuerza y emoción que experimenta la mujer a diario, y la mostró con vestidos con bordados victorianos, guipur y flores bajo chaquetas de cuero.
Stella McCartney, Balenciaga y Dior también se dejaron ver por París y pasaron la velada con nota. En el primer caso, la hija del exBeatle Paul McCartney ha desgranado su producto en dos colecciones, una más femenina y otra más noventera, y en las que vimos monos de ciclista, gabardinas XXL, semitransparencias y vestidos vaporosos. Balenciaga presentó en negro con colores llamativos una vuelta a los ochenta de la mano de pronunciadas hombreras en piezas de lo más otoñales. Dior volvió a su versión más femenina con prendas inspiradas en el ballet, a base de gasa, crepe de seda o tul y basculando del negro al nude, todo ello contemplado por Chiara Ferragni, las hermanas Hadid, Blake Lively, Jennifer Lawrence y Dulceida.
Gucci contó con la presencia de Faye Dunaway (triunfó en los 60 con Bonnie & Clyde), su nueva imagen, y compartió ‘front row’ con los hollywoodienses Jared Leto, Soko y Salma Hayek en la comparecencia sesentera de la firma. Por su parte, Dries van Noten asombró con una gama fantástica para primavera a base de amarillos y verdes acompañando looks de día y de noche.
Saint Laurent puso el color negro, los volantes, algún chaleco boho y el animal print en la plaza de Trocadero, con la Torre Eiffel como testigo de excepción y una masa de agua sobre la que desfilaron las modelos. Y hablando de ‘animal print’, estampado de la temporada, Rochas lo ejecutó en buena parte de su colección presentada.
El diseñador indio Manish Arora mostró la colección su colaboración con el equipo francés Paris Saint Germain (PSG), Rahul Mishra enamoró con su último apuesta y la prestigiosa diseñadora francesa Agnès B. mostró su mejor versión para la temporada que está por venir.
También asistimos al debut de Marqués’ Almeida, Altuzarra puso la chispa más colorida, comprobamos el estilo del siglo XIX de John Galliano y la nota más parisina de la mano de la firma Sonia Rykiel, tanto por la atmósfera creada como por los estampados de rayas marineras, los amplios jerseys, los vestidos y abrigos ligeros en su colección ecológica. Todo ello entre otras piezas geniales de firmas como Chloé o Paul & Joe, entre muchos otros.
Pero lo mejor es que veáis esta galería con nuestros modelos favoritos de la Semana de la Moda en París, ¡te encantará!
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