9 prendas que los invitados de boda no deben llevar bajo ningún concepto
Porque hay eventos en los que el "todo vale" debería permanecer enterrado para evitar un mal irreparable. ¡Toma nota!
Todas las bodas vienen acompañadas por unas reglas generales. Aunque cada celebración tiene su propia personalidad, hay elementos comunes que marcan unas directrices. En este caso, hablamos de moda, en concreto sobre las prendas que jamás deberían verse en un evento de estas características. Aunque algunas son obvias (también las mencionaremos), otras necesitan nuestro recordatorio para que no metas la pata. ¡Muy atenta!
Ropa blanca (si no eres la novia)
Un clásico de los “no” que no siempre se respeta, incluso en las grandes celebraciones. La novia elige el blanco en el 99% de las ocasiones y no es plato de buen gusto que otra persona intente eclipsar a la protagonista, aunque esa no sea su intención. El blanco no está prohibido si se mezcla con otros colores, pero el look no debería tenerlo como tono estrella. ¡Hay cientos de colores!
El mismo color que las damas de honor
No querrás que te confundan con una de ellas o parecer una persona solitaria a la que ha abandonado la manada. Si no te consideran parte del grupo, tampoco quedarás bien; te darás cuenta de ello al ver las miraditas que las damas de honor te echen durante todo el día. De esta forma, parece que buscas una importancia que no te corresponde, por lo que infórmate antes de nada y elige otro color.
Prendas vaqueras
Terminantemente prohibidas si no quieres hacer el ridículo. La moda vaquera nunca se ha ido, sobre todo en materia de pantalones, y queda constatada su gran aceptación con la vuelta de las camisas y las cazadoras de este material. Pero, ¿para una boda? ¿En serio? Su utilización evidencia que deseas quitar importancia al evento buscando la informalidad cuando hay miles de formas de quedar elegante sin ir especialmente recargado.
Zapatos planos
Es cierto que se llevan bastante, pero también restan la elegancia que aporta un buen tacón. Ya sabemos que un zapato de tacón estiliza la figura al completo, desde el pie hasta la nuca. ¿Por qué renunciar a sus encantos? Además, casi todas las mujeres optarán por llevarlos y, si no eres muy alta, quizá quedes algo desproporcionada. Eso sí: resérvate un buen zapato plano para la fiesta, por si la incomodidad y los dolores hacen su aparición.
Camisas de manga corta y pantalones cortos
Las camisas de manga corta volvieron hace unos años, a pesar de las duras críticas que han recibido. Las visten los modernos y quedan bien para ir de festival o salir de fiesta por bares alternativos. Sin embargo, no pegan en las bodas, sobre todo si lo combinas con un traje (algunas personas llorarían si vieran que debajo de la chaqueta llevas una camisa de manga corta). Por otro lado, los niños suelen elegir los pantalones cortos para los eventos importantes, sobre todo si se dan en verano. Pero tú, que quizá ya hayas superado la adolescencia, no deberías pecar de informal ni de revolucionario.
Bolsos grandes
Por muchas cosas que puedas necesitar en una boda, desde maquillaje hasta recambios de zapatos, no utilices un bolso gigante con esa excusa. Si vienes en coche, guarda todo lo que puedas allí, pero no traiciones tu conjunto con una monstruosidad que no viene al caso en una boda. Los bolsos sirven para decorar, pero para una boda, optamos por lo sencillo y elegante, en concreto los bolsos de mano. Lo importante es que sean pequeños para ganar en sofisticación.
Ropa excesivamente brillante o chillona
No queremos que te confundan con un chico que espera a la grúa en el arcén de la autovía, así que huye de esos colores que dañan a la vista. Hay fiestas de disfraces en las que puedes excederte, incluso en una nochevieja más loca de lo normal. Pero, en una boda, no hay lugar para el histrionismo, sobre todo si no tienes demasiado “rollo” para “dar el cante” con estilo. Intenta ser original con colores más apagados y combinaciones que tengan sentido.
Ropa de deporte
Parece una obviedad, pero en los últimos tiempos hemos asistido a una extraña revolución en la que las prendas deportivas se combinan con ropa o complementos formales. Así, hemos visto a un gran número de personas mezclar vestidos con zapatillas de hacer running (última moda hipster extendida a casi toda la población joven), y a celebridades como Rihanna luciendo pantalón de chandal con tacones, recibiendo críticas dispares. Aunque famosos como ella, que siempre se han caracterizado por un aire rebelde y una filosofía de vida sin restricciones, podrían llevar algo así y quedar como iconos de estilo, tú no eres Rihanna y las bodas no son una entrega de premios de la MTV. Subirse al carro de las tendencias a veces no es buena idea, sobre todo en ciertos eventos.
Apunta bien todas estas prohibiciones y evita un ridículo que permanecería en la retina de todos, o al menos en las fotos de esa feliz pareja que se avergonzaría de ti. Puedes jugar, pero intenta no quedar en fuera de juego.
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