Verónica e Iván se conocieron en el Molino de Covanera, en Burgos, a través de unos amigos. Allí mismo, años después, tuvo lugar la pedida de mano, un 18 de junio, un día que la novia recuerda como “perfecto y de lo más romántico”. Iván escogió el lugar donde se vieron por primera vez para entregarle a Verónica el anillo de compromiso y comenzar una nueva etapa juntos.
Los novios
La boda tuvo lugar el 29 de septiembre de 2018, un día que la novia sabía que lo recordaría para toda su vida, por ello, puso especial énfasis en elegir su look. Para confeccionar el gran protagonista, el vestido, escogió a la diseñadora Alicia Rueda. “Me diseñó un vestido sencillo de estilo romántico, con una pequeña cola de seda, cuerpo de guipur y un escote en V en la parte de la espalda”, cuenta Verónica.
Acompañó su vestido con unos zapatos peeptoe de Jorge Larrañaga, en color rosa nude y tacón cuadrado. “Los elegí para disfrutar del entorno de la boda y aguantar todo el día con ellos, son comodísimos”, señala. Como complemento principal, optó por el ramo. Las flores son siempre bienvenidas en una boda e imprescindibles en el look de novia porque aportan alegría y color. Por ello, confió en Cultura de Flor, que compuso un ramo de gran tamaño, de estilo desestructurado, en verde y granate.
Eride y Peluquería Nati se encargaron de su maquillaje y peinado. Verónica quería lucir natural, se decidió por una larga trenza de efecto despeinado, adornada por una bonita corona floral, a conjunto con las flores del ramo. ¡Ideal para el look de Verónica!
Iván se vistió con un chaqué de Sastrería Foraster, en color azul, que combinó con un chaleco de cuadros en el mismo tono, tirantes de lunares y una corbata estampada. ¡Elegante y original!
La ceremonia
Llegado el momento de la ceremonia, la novia se presentó del brazo de su padre, mientras el novio la esperaba en el altar acompañado de su madre, como manda la tradición. De cada momento se hizo eco el equipo de Rod&Cone, inmortalizándolos en instantáneas frescas y llenas de naturalidad.
El banquete
Tras el intercambio de votos y alianzas, todos se dirigieron hacia la zona del banquete que celebraron en Monasterio del Espino. Allí, degustaron en primer lugar un exquisito cóctel y después conversaron en las mesas del banquete hasta la llegada del baile. Unas mesas decoradas a la perfección, con gran gusto y sofisticación por Lady Frambuesa escogiendo como colores principales el verde, el malva y el granate. ¡No falto detalle! Y tampoco faltaron rincones llenos de encanto en los que todos los invitados quisieron fotografiarse, como el arco creado a base de plumeros en el que se podía leer con letras XXL “Juntos es mejor“.
Baile de los novios
Todos esperaban el gran momento, el baile de los novios, su primer baile como matrimonio. Comenzó con las primeras notas de Yo no sé mañana, de Luis Enrique, y terminó con todos los familiares y amigos uniéndose para celebrar una gran fiesta que se prolongó hasta bien entrada la madrugada.
Verónica e Iván recuerdan su boda como “una celebración perfecta” y es que contaron con la ayuda del equipo de wedding planner de Lady Frambuesa, que tuvo mucho que ver en ello. Hubo risas, emociones, sentimientos y mucho, mucho amor. ¡Enhorabuena pareja!
Lugar de celebración: Monasterio del Espino | Vestido de novia: Alicia Rueda | Traje de novio: Sastrería Foraster | Complementos de novia: Jorge Larrañaga | Floristería, decoración, detalles para invitados y photocall: Cultura de Flor | Wedding planner: Lady Frambuesa | Fotógrafo: Rod & Cone | Maquillador: Eride | Peluquero: Peluquería Nati y Juan Manuel Arce Estilistas | Viaje de novios: Viaje Atapuerca | Invitaciones: Lady Frambuesa
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