La barba lleva tiempo de moda. De hecho, en los últimos años ha subido la tendencia, en concreto por una especialmente larga, rala y poblada, prácticamente mesiánica. La moda hipster y retro (que a veces son lo mismo) han contribuido a ello. Sin embargo, la barba de tres días, minuciosamente tratada, y otras más estándares, todas ellas siempre presentes entre nuestra población, siguen en lo más alto. Tanto si eres novio o invitado con barba, esto es lo que debes hacer para lucirla más cool en ese gran día.
Lava la barba cada día
Es curioso, pero los portadores de barba a veces olvidan que esta existe y que merece el mismo cuidado que el pelo de la cabeza. La barba tiene pelo y, como tal, hay que lavarlo, pues está expuesto a diario a todo tipo de inclemencias: humos, olores, polvo… Por ello, hay que tratarla por separado. Si es abundante, aprovecha la salida de la ducha para que el vello esté húmedo.
Cepíllala después de lavarla
Si tienes el típico vello facial superficial no hace ninguna falta, pero su este cubre tu cara en consideración, agénciate un cepillo especial y dale rienda suelta por tu melena facial, aunque no sea excesivamente larga. Además de desbaratar los nudos que pueden hacerse, el cepillado favorece la circulación de la sangre en la cara, lo que implica una barba más fuerte, además de motivar la regeneración capilar.
Arreglar
Por un lado, algunos hombre se perfilan la barba de una manera milimétrica, tanto con la cuchilla de siempre como con maquinillas especiales que recortan a la perfección. Las señales de corte son evidentes, pero todo depende de los gustos. Aprovecha la salida de la ducha y el cepillado para hallar el caos y arreglarlo.
Por otro lado, también encontramos a los hombres que buscan la informalidad o un desorden provocado. Para ello, dejan crecer su barba sin orden ni concierto, como si estuvieran en la Edad Media. Este tipo de barbas son interesantes, pero antes de parecer un vagabundo, lo aconsejable sería cortar los pelos sueltos con unas tijeras pequeñas y, si no buscamos una barba muy larga, utilizar la maquinilla especial para rebajar, pero sin cortar por lo sano y dejar marcas. De esta forma, el crecimiento de la barba parecerá más natural. Pero si lo que buscas es esa enorme bosque de hipster, trata de arreglarla limando las zonas desiguales y más estropeadas. Incluso el caos necesita un orden.
Hidrátala con cuidado
El verano acaba de terminar y, teniendo en cuenta que el calor sigue presente en muchos países, es más probable que la barba se seque. Por ello, utiliza acondicionadores y aceites específicos para vello facial y evita que tu preciada barba se vea atacada por el encrespamiento, el enredo o la sequedad. Aplícate estos productos cuando hayas completado convenientemente los dos pasos anteriores, con la barba seca si es corta y húmeda si es media o larga.
Sécala
Cuando ya has terminado de ponerla a punto, es decir, tras el lavado, cepillado y la aplicación de productos, lo ideal sería secarla para evitar el típico olor a humedad. Aunque ya te hemos explicado que, en caso de barba larga, es necesario que este húmeda antes de arreglarla, después de cualquier exposición al agua, sobre todo en piscinas y mares, también es conveniente secarla.
Los bálsamos como protección
En verano y en momentos de calor, los aceites deberían sustituirse por bálsamos. Además de poder moldear toda la masa barbuda, protegen de los agentes externos e hidratan todo el vello facial. La cera de abejas y aceites esenciales que dan vida a estos productos son vitales para su función de protección e hidratación.
Las barbas se han convertido en un complemento de culto para los hombres más modernos. Por otro lado, otros tantos, instalados en diferentes grupos sociales, siempre han llevado barba y quizá no conocían todos los cuidados que requiere para su correcta manutención. Si no tienes una rutina diaria, intenta aplicarte para la próxima boda. ¡La ocasión lo merece!
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