• Magazine
  • Cuando menos lo esperas: la boda de Estíbaliz y José Antonio

Cuando menos lo esperas: la boda de Estíbaliz y José Antonio

Aunque siempre habían pertenecido al mismo grupo de amigos, hicieron falta unas gafas de sol extraviadas para que Estíbaliz y José Antonio se fijasen el uno en el otro. A partir de ahí comenzó una historia que acabó en una boda llena de detalles. ¡No te la pierdas!

  • Real weddings
  • Alicante

¿Cuántas veces has oído que el amor de tu vida puede estar delante de ti sin que tú te des cuenta? Eso fue lo que les sucedió a Estíbaliz y José Antonio. Pese a que se conocían desde siempre, puesto que pertenecían al mismo grupo de amigos, no fue hasta que coincidieron en una fiesta en el campo en la que él se dejó sus gafas de sol, que ella le devolvió, cuando empezaron a hablar y se dieron cuenta de que estaban hechos el uno para el otro.

guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
Publicidad

Tras una pedida de mano hecha a medida de la novia, en uno de sus lugares favoritos de La Romana, Estibaliz y José Antonio empezaron a preparar una boda que fue retratada, como siempre con este toque de magia que solo ellos saben dar a las imágenes, por Kiwo Estudio Creativo.

Partiendo de la idea de que un vestido de novia no debe ser un disfraz sino que debe hacer que la novia se sienta ella misma en todo momento, Estibaliz pronto tuvo claro cómo sería el suyo. “Elegí un diseño de Pepe Botella. Lo tuve claro en el momento que vi su desfile porque no era un vestido de novia al uso. Se trataba de una falda con brocado, y una blusa de manga larga de corte masculino con cristales swarovski como botones. Me encantó”, cuenta.

guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.

Tras hacer una serie de modificaciones al modelo original, que incluían un corpiño de la misma tela de brocado que la falda, con escote de pico por la espalda y escote corazón en la parte delantera y una chaquetilla, de tirantes, con cristalitos swarovski alrededor de cuello y mangas que iba sobrepuesta al corpiño y con la espalda abotonada, el vestido estuvo listo para hacer de Estíbaliz una novia con estilo propio.

guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.

Unos pendientes de estilo antiguo y una pulsera antigua fueron las joyas por las que se decantó Estíbaliz. Tampoco descuidó sus zapatos, unos peeptoes plateados sujetos al tobillo de Patricia Miller, ni su ramo, del que se encargaron en La Floristería de Valentina (Elche): “Quería algo sencillo y con toque rústico, vintage, dulce… como todo el estilo de la boda. Iba combinado con paniculata y otras flores blancas y verdes y el resultado fue tal y como esperaba”, explica.

guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.

Para su peluquería y maquillaje Estíbaliz confió en Luri Peluqueros y en dos esteticistas de La Romana. El peinado, un recogido bajo que adornaron con un tocado elaborado con semillas de El tocador de la novia, era sencillo y natural. Justo lo que la novia había soñado.

guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.

José Antonio, por su parte, apostó por un traje de corte italiano de la tienda Marco Novio. Se trataba de un modelo negro, con un poco de brillo, entallado y de pantalones estrechos, con un corte juvenil. Lo complementó con un chaleco blanco con puntadas en negro, ribeteado en negro, con 5 botones, cruzado y una corbata negra con topos blancos.

guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.

Y así, sencillamente guapísimos, llegaron los novios, cada uno por su lado hasta la Iglesia de San Pedro Apostol de La Romana, donde tuvo lugar la boda.

guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.

Tras la ceremonia, los novios se marcharon acompañados de los chicos de Kiwo Estudio Creativo a hacerse sus primeras fotos como marido y mujer. El choche escogido por la pareja, un antiguo 600 fue una de las sensaciones del día, aunque aún quedaba mucho por suceder. Para la decoración del coche y de la iglesia confiaron también en La Floristeria de Valentina que hizo verdaderas maravillas con la paniculata para crear los adornos perfectos para su gran día

guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.

Mientras, sus invitados llegaban a la finca de la familia de Estíbaliz donde tuvo lugar el convite servido por Alfonso Mira donde descubrieron que los detalles, elaborados por los propios novios, no faltaban.

guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.

Desde un rincón para el photocall con un carro antiguo del abuelo de la novia, hasta un sitting plan con un barril gigante y partituras para indicar las mesas. Una maleta antigua (del bisabuelo de Estíbaliz) y varias cajas de frutas sirvieron de córner para el libro de firmas, centros de mesas elaborados con tarritos de cristal con paniculata sobre una madera, y una pequeña planta verde que en otras mesas se combinaban con candelabros… Y así hasta un sinfín de detalles que hicieron las delicias de sus invitados y les hicieron sorprenderse con cada rincón de la boda

guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.
guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.

Y por último, a ritmo del bolero “Perfidia”, los novios bailaron por primera vez como marido y mujer dando paso a una fiesta que se prolongó hasta altas horas de la madrugada.

guardarFoto: Kiwo Estudio Creativo.
Foto: Kiwo Estudio Creativo.

Y es que cuando las bodas se cuidan al detalle, como en este caso, nada puede fallar y la felicidad es aún más patente en los rostros de los novios y de sus invitados. ¡Enhorabuena a la pareja y muchas gracias por compartir vuestro enlace con nosotros!

Si te ha gustado esta boda, no te pierdas la de Isabel y Víctor, la historia de un amor a primera vista, ni la de Cristina  y Rodrido, a quienes unió el instituto.

Selecciona a los proveedores que quieres contactar

Pepe Botella Diseñadores de novia
Marco Novio Tiendas novio
Kiwo Estudio Creativo Fotógrafos bodas
Patricia Miller Zapatos novia
Restaurante Alfonso Mira Restaurantes bodas
Publicidad

¿No te quieres perder las últimas novedades para tu boda?

Suscríbete a nuestra newsletter

Escribir un comentario

Lista de bodas Zankyou ¡Recibe el 100% de tus regalos en cash!