Una elegancia sublime: la boda de Azahara y Antoni
Desde el primer momento los novios supieron que contarían para la organización de su boda con la ayuda de un profesional en planificación de eventos, y cuando conocieron el trabajo de Los Pendientes de la Abuela, no tuvieron dudas.
“El alma que hablar puede con los ojos, también puede besar con la mirada”, Gustavo Adolfo Bécquer.
Azahara y Antoni se conocieron una bonita noche de verano en Barcelona, en una cena informal de amigos en común. La pedida de mano tuvo lugar el día del cumpleaños de Azahara, después de salir a cenar para celebrarlo. Al llegar a casa, Toni se arrodilló con el anillo de compromiso que perteneció a su abuela y le dio la sorpresa. Por supuesto, la respuesta fue un gran “sí”. Ambos comenzaron a organizar la boda y pusieron fecha al esperado día: sería el 10 de noviembre de 2018, una bonita boda de otoño.
Desde el primer momento sabían que contarían con ayuda profesional para la organización del gran día, y no dudaron ni un segundo cuando conocieron a Los Pendientes de la Abuela. El objetivo de este equipo de wedding planner es “crear bodas con corazón”, y después de ver la de Azahara y Antoni, no nos queda duda de ello. La pareja no quería que, algo tan bonito y especial como tenía que ser la planificación de la boda, les supusiera un estrés, y encontraron en esta empresa todo lo que necesitaban, una organización integral, búsqueda de proveedores, asesoramiento, coordinación del día B y mucho más.
Los novios
Y comenzaron por lo más importante. La novia siempre había soñado con un vestido sencillo pero con personalidad, y encontró el diseño perfecto en la firma St. Patrick, el modelo Laura. Era un vestido de corte sirena confeccionado en crepé, con escote barco y espalda abierta en V. Las mangas eran largas en crepe perforado simulando motivos florales. ¡Precioso!
Combinó el vestido con unos zapatos salón de punta fina y tacón alto en color nude, de Pura López, y un ramo de novia, obra de Pepe Von Strudel, una composición otoñal de inspiración retro, con rosas color maquillaje, hojas de magnolia color caramelo y flor de cardo azul.
En cuanto a las joyas, llevó el anillo de compromiso en platino y diamante, perteneciente a la abuela del novio, y unos pendientes de oro blanco, diamantes y perla natural, de la madre de Antoni.
De su maquillaje se encargó El Tocador de Brenda, creando un look natural con mejillas rosadas, y de su peinado Sidartha Estilistes, que trabajó el cabello de Azahara para dejarle un peinado suelto y liso con el que lucía perfecta.
Antoni se decantó por un traje de novio hecho a medida en Sastrería Señor que combinó con una camisa de seda y algodón en espiga, una corbata de seda, ambas de Hawes & Curtis, y unos zapatos tipo Oxford en piel de Martinelli. Lució unos gemelos de oro de su padre y un reloj de oro de la firma Zenith de su abuelo.
Para las alianzas, mezclaron oro de ambas familias como símbolo de unión en M. Herrero Joiers. ¡Un gesto precioso!
La ceremonia
La ceremonia se celebró en el Saló de Cent de l’Ajuntament de Barcelona. Allí, los novios se dieron el “sí, quiero” e intercambiaron las alianzas ante la atenta mirada de Lirola & Cussó, sus fotógrafos, que captaron todos los momentos de la boda de una forma emotiva y con un resultado muy fresco y natural, justo lo que los novios buscaban.
El banquete
El banquete se celebró en El Palace Hotel Barcelona, que fue decorado a la perfección con centros florales y rincones ambientadas con flores por Pepe Von Strudel. “La decoración floral fue exuberante, con toda la paleta de colores del otoño y de inspiración retro. Hubo toques a conjunto con el ramo de novia, con rosas en color maquillaje, hojas de magnolia en color caramelo, flor de cardo y delphinium en color azul, que se combinaron con el blanco de la hortensia para dar un toque delicado”, explican los novios.
Los Pendientes de la Abuela se encargó de que toda la decoración del día siguiera una misma línea, la que habían planeado desde muchos meses antes, de manera que todo el conjunto tuviera sentido y la celebración fuera espectacular.
En el hotel, además de disfrutar de la decoración, degustaron las delicias preparadas por el chef Marc Masallén. ¡Los invitados disfrutaron al máximo! Además, se llevaron como recuerdo unos macarons de ganache de chocolate, rosa y lichi, de Enric Rosich.
Baile de los novios
El baile se abrió con la canción Strangers in the night, de Frank Sinatra, interpretada por el grupo The Summer Lovers. “Ambos nos conocimos una noche del mes de julio y, además de ser un artista muy admirado por los novios, Frank Sinatra era el cantante preferido del abuelo de Antoni, por lo que nos pareció un bonito homenaje”, comentan.
Azahara y Antoni recuerdan su boda como “espectacular”. Y no es para menos, ya que todo se desarrolló a la perfección. Mucha ‘culpa’ de ello tuvo el equipo de Los Pendientes de la Abuela, que estuvo pendiente en todo momento de cada detalle. Su experiencia y formación en eventos le permite ser capaz de organizar eventos de la talla de una boda y poder solucionar cualquier imprevisto en el caso de presentarse.
Desde Zankyou les damos la enhorabuena y les deseamos toda la felicidad del mundo en esta nueva etapa juntos.
Wedding planner: Los Pendientes de la Abuela | Lugar de celebración: El Palace Hotel Barcelona | Vestido de novia: St. Patrick | Zapatos: Pura López | Traje de novio: Sastrería Señor | Floristería: Pepe Von Strudel | Catering: Chef Marc Mallasén | Fotógrafo: Lirola & Cussó | Maquillador: El Tocador de Brenda | Peluquero: Sidartha Estilistes | Detalles para invitados: Enric Rosich | Dj: The Summer Lovers
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