Los comienzos de Naty Fogaça fueron hace casi una década, decorando la fiesta del primer cumpleaños de su hija y usando su colección de porcelana vintage. “Terminó convirtiéndose en mi firma, utilizando parte de mi colección en las bodas que produzco”, cuenta la experta. Hoy en día, además de su colección, se provee de los mejores objetos decorativos de proveedores locales, consiguiendo crear escenarios como los que os presentamos, sublimes. Ese es su sello personal.
La diseñadora produce arte. De hecho, no firma las bodas como decoradora, sino como “productora artística”, indica. El alcance de la decoradora es más limitado y, en el caso de las bodas, se ha centrado en los elementos florales para poder configurar un marco idílico. Pero va mucho más allá de las flores. “Me gusta pensar en el proyecto como un todo, desde el estilo, el lugar, el equipo, la logística, el bar y la cocina, el entretenimiento…”, detalla. Un todo para el que cuenta con el apoyo de un equipo extraordinario, que le permite actuar tanto a nivel local como internacional.
Como todo artista, se inspira en aquello que le produce sensaciones y emociones. Explica que su inspiración viene “desde el maximalismo de Sig Bergamin al urbanismo distópico de Ridley Scoth, de canciones italianas y francesas de los años 60, de Lisboa y Madrid, y de Londres y Nueva York, de culturas milenarias, como la egipcia y la india, de la época del Renacimiento, de la voz de Freddy Mercury, de la minería para piezas de decoración…”. Su inspiración bebe de todo aquello que le apasiona y de ese cóctel surgen estos maravillosos resultados.
Como cada pareja es única, Naty Fogaça es consciente de que todas merecen una atención personalizada. Por ello, dedica mucho tiempo a preparar una propuesta, ya sea para una boda de dos o para una boda con invitados. Confiesa que le encantan los eventos exclusivos, aquellos en los que tiene que dar todo de sí. Considera un “proyecto perfecto” a “aquel en el que se ha planificado cada detalle y en el que todos los proveedores están alineados en cuanto al estándar de calidad a entregar”.
Apunta que, para ello, “es fundamental ganarse la confianza de los novios, acompañarlos personalmente cada paso, desde las visitas técnicas, hasta la recepción de materiales, elección de piezas, montajes estructurales, elección de paleta de colores, presentación del proyecto, búsqueda constante de referencias… y, por supuesto, estar presente personalmente en el día soñado”.
Tendencias en decoración
Naty Fogaça cuenta que esta temporada tendremos celebraciones más pequeñas, con una mayor inversión económica. Comenta que los novios dejarán de lado los espacios de celebración grandes e impersonales y apostarán por lugares más íntimos con un carácter especial.
También habrá una mayor preocupación por los reportajes de foto y vídeo. “Esto traerá una mayor atención a los aspectos estéticos, como la ubicación y la decoración, así como el look de los novios”, dice.
En definitiva, según la profesional, se verán bodas más íntimas, con mayor atención al detalle, ceremonias y ensayos fotográficos en lugares insólitos, decoración con catering incluido para espacios reducidos, menos hoteles y más espacios como el propio hogar, por ejemplo. Cuenta que se respetará la tradición, pero aliada a la innovación.
Naty Fogaça se involucra al máximo en cada boda intentando superar sus propias expectativas, buscando un perfeccionismo en toda su creación. Por tanto, su mayor desafío “es mantener siempre muy alto el estándar de calidad profesional”, expresa. Para ello, juega con las emociones, que sabe que son clave para hacer sentir a los novios e invitados. “Es necesario tener en cuenta todos nuestros sentidos, comenzando por el visual, el más desarrollado de ellos. Después viene la audición y la degustación. El resultado debería conducir a una experiencia verdadera y profunda para todos los involucrados”, declara.
Naty Fogaça está dispuesta a producir matrimonios en cualquier entorno, “desde volcanes en erupción hasta barcos hundidos”. “Me complace mucho hacer que lo bello sea aún más espléndido. Y me gusta aún más, transformar esos ambientes que aparentemente son difíciles de decorar, como las playas, las cuevas, los picos, los lugares en ruinas, en fin, la imaginación es el límite”, aclara. ¿Estáis dispuestos a comenzar a soñar con vuestro gran día?
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