Cómo organizar una boda religiosa en 5 pasos

La ceremonia, y en ocasiones, la fiesta, vienen determinados por aspectos que cambian según el tipo de boda. Para no liarte, te explicamos cómo organizar una boda religiosa en 5 pasos.

Cómo organizar una boda religiosa en 5 pasos
Foto: Lucía Romero
  • Bodas religiosas
  • Católica

Hoy en día, las bodas religiosas y civiles solo varían en la ceremonia, ya que el espectáculo que viene a continuación suele seguir los mismos patrones. Sin embargo, la ceremonia, y en ocasiones, la fiesta, vienen determinados por aspectos que cambian según el tipo de boda. Para no liarte, te explicamos cómo organizar una boda religiosa en 5 pasos.

1. Iniciar los trámites

2. Preparar los documentos necesarios

3. Elegir parroquia o una alternativa

4. Escoger el vestido de novia adecuado

5. Dejarse llevar durante el resto de la boda

1. Iniciar los trámites

Publicidad

Si has decidido casarte por la Iglesia, hay varios procedimientos que debes iniciar, los cuales pueden variar según la diócesis. En primer lugar, debes pedir cita en tu iglesia y para informarte sobre el matrimonio canónico, recibir explicaciones sobre su naturaleza y los requisitos para poder asumirlo. Se valorará la capacidad para consentir dicho matrimonio con algunas preguntas que determinarán si existe coacción o incapacidad para dar el paso.

En el caso de las parejas en los que solo uno de los miembros sea católico y por tanto, sea un matrimonio mixto, el otro tendrá que bautizarse y esperar a que la partida de bautismo cumpla los seis meses de antigüedad. También podéis pedir una dispensa al Vicario General o a la Notaría de Curia del Obispado o Arzobispado de vuestra ciudad.

Durante este proceso, también se llevan a cabo los cursillos prematrimoniales que son obligatorios, ya que el certificado obtenido por los mismos será uno de los documentos que deberás presentar para solicitar el expediente matrimonial. Estos cursillos son importantes para prepararte en el matrimonio canónico y se pueden iniciar, según algunas parroquias, con un examen para determinar la forma correcta para orientarte a ti y a tu pareja de cara al matrimonio.

Dichos cursillos pueden impartirlos un sacerdote o una pareja con experiencia elegida por la parroquia. En dichas clases se tratarán temas como la oración, el significado del matrimonio y los papeles sacramentales, y se realizarán programas especiales para los segundos matrimonios, la incorporación de los hijos a un matrimonio y los matrimonios interconfesionales. Y, por suerte, los cursos prematrimoniales se pueden hacer en una iglesia diferente a la que utilizaréis para la boda.

guardarCómo organizar una boda religiosa
Foto: Issa Leal

En este apartado también se dispone el expediente matrimonial, el cual debes realizar entre tres y seis meses antes de celebrar la boda. Este es el primer paso para legalizar el matrimonio ante el Registro Civil y ante la Iglesia, y requiere unos documentos que te explicaremos a continuación. Pero, antes de nada, es importante saber cómo conseguir dicho expediente, ya que de la parroquia a la que cada persona esté adscrita según el domicilio o cuasidomicilio. Si ambos pertenecen a la misma, lo realizarán juntos; si pertenecen a parroquias separadas de la misma diócesis, podrán realizarlos juntos o por separado; en caso de que pertenezcan a iglesias de diócesis diferentes, tendrán que realizarlo por separado. Hoy en día, es mucho más sencillo conocer a gente de otros lugares y enamorarse de personas de otras ciudades, comunidades autónomas o países, por lo que la última opción sería la más habitual en los últimos tiempo.

2. Preparar los documentos necesarios

A la hora de preparar el expediente matrimonial, el sacerdote encargado de tramitar tus documentos te pedirá una serie de papeles vitales para la aceptación de tu matrimonio según las normas diocesanas que entraron en vigor el 31 de julio de 2014. Y, en este caso, necesitas más documentos que para la boda por lo civil, los cuales han de tener al menos seis meses de antigüedad.

En cuanto a los comunescomunes con el matrimonio por lo civil, necesitas el DNI o copia compulsada con el original, partida literal de nacimiento expedida por el Registro Civil correspondiente al lugar de nacimiento, certificado de nacimiento, Instancia del Registro Civil, declaración jurada de estado civil de soltería (se solicita en el Registro Civil) y, en caso de divorcio o anulación tras matrimonio civil, o de viudedad, el certificado literal del matrimonio anterior en donde consta el divorcio o el certificado de defunción del cónyuge fallecido.

En relación con los documentos que solicita la Iglesia:

Necesitas el Acta de Bautizo de ambos novios; como te hemos explicado anteriormente, este Acta debe tener seis meses de validez, por lo que los novios que no estén bautizados pueden hacerlo y aceptar así la entrada en la comunidad católica. En este sentido, es importante destacar que no es necesario haber hecho la comunión, lo que impide el hecho de comulgar durante la misa de la boda (si crees conveniente que esta se desarrolle), así como la confirmación, aunque la Iglesia recomienda la celebración de este sacramento para recibir el matrimonio con más preparación y, en caso de no haberla hecho, acometerla en estos momentos de iniciación a la vida en común. Todos estos Actas se solicitan en las parroquias donde se recibieron los mencionados sacramentos.

Tus familiares participantes también tienen que presentar sus documentos de identidad, así como del padrino y de la madrina si no se corresponden con los progenitores. A los extranjeros se les solicita el pasaporte.

Necesitas también el certificado y acreditación de haber realizado la atención pastoral prematrimonial y, además, el certificado de residencia para saber qué iglesia te corresponde. De hecho, también puedes casarte lejos de tu residencia y, por consiguiente, lejos de tu diócesis, pero en ese caso tendrás que descubrir a cuál pertenece la parroquia escogida y preguntar al párroco.

En cuanto a los casos especiales, los cuales han de avisarse con tiempo para realizar los trámites oportunos en caso de necesitarlos. Estos serían si uno de ellos es de un país que no pertenezca a la Unión Europea (los documentos en otro idioma deben estar acompañados de traducción notarial), si alguno de los contrayentes no es católico, si alguno ha obtenido la nulidad de su matrimonio canónico anterior, o si ha se ha obtenido sentencia de divorcio tras un matrimonio civil.

3. Elegir parroquia o una alternativa

La mayoría de las bodas religiosas se realizan en las parroquias locales de los cónyuges, aunque también es habitual que, si ambos pertenecen a lugares diferentes, los novios se casen en la iglesia de la ciudad o pueblo de la chica. Y, por suerte, dentro de la mayor limitación que suponen estas ceremonias por los espacios posibles, existe variedad en cuanto a los templos disponibles: parroquias, ermitas, altares en el exterior de las iglesias, catedrales, capillas…

Pero, ¿puede una pareja casarse al aire libre? En el campo, en la playa, en unos jardines… Depende de la Diócesis y de la autorización del Ordinario u Obispo de la Diócesis, que juzgará la conveniencia de la celebración a partir de las circunstancias que se presenten.

guardarCómo organizar una boda religiosa
Foto: Gimena Berenguer

En principio, no habría ningún problema, pero las restricciones del pasado y la tradición de algunos sacerdotes ha generado cierto estigma que pervive y que provoca que muchos curas rechacen dicha posibilidad. Por suerte, los sacerdotes más jóvenes se prestan mucho más a ello.

Si finalmente el párroco se niega a casaros de esta manera, siempre podéis hacerlo dentro de un templo y combinarlo con una ceremonia simbólica al aire libre. No es la mejor solución, pero es una posibilidad si encontráis esas negativas.

4. Escoger el vestido de novia adecuado

No es que existan restricciones a la hora de elegir vestido de novia en una boda católica, pero sí es cierto que se recomienda un poco más de recato que en las bodas civiles, abiertas a mayores experimentos. Aun así, no hay por qué renunciar a la sensualidad y a la expresión de las formas femeninas.

Intenta evitar los escotes demasiado pronunciados, como los V profundos o aquellos que se abren en exceso por la espalda, así como los vestidos cortos. No es que solo puedas vestir un vestido de corte princesa, pero hay otros muchos menos voluminosos y más sexys que pueden quedar bien sin salirse de la línea que marca el protocolo de la Iglesia. Evidentemente, la época del año será también vital para determinar el tipo de vestido, ya que, por mucho respeto que se busque, hay momentos que implican un brazo al descubierto o menos tela para evitar sufrir con temperaturas altas. Depende de muchas circunstancias.

guardarCómo organizar una boda religiosa
Foto: Alejandro Onieva

El velo es uno de los elementos que mejor complementa un vestido en una boda católica. Demuestra sofisticación y cierto respeto por las tradiciones, sin dejar de hacer sentir bella a su portadora.

Sin embargo, ese recato está más reservado al momento de la ceremonia, pero durante el banquete y la fiesta no existen restricciones en el protocolo y puedes hacer lo que más te apetezca. Ello implica la utilización de un segundo vestido, tal y como se hace en muchas bodas, sobre todo en las de los famosos,  o que liberes algunas prendas del primero que habías utilizado para tapar brazos al aire, espaldas y escotes durante la ceremonia.

5. Dejarse llevar durante el resto de la boda

Si bien es cierto que las bodas religiosas tienen más normas, aunque algunas de ellas no estés escritas y se realicen por mero protocolo, hay momentos en los que esas bodas adquieren la categoría de boda a nivel general, donde las religiosos y civiles se comportan de la misma forma.

guardarCómo organizar una boda religiosa
Foto: Kairos Estudio

Cuando sales del Ayuntamiento, iglesia o jardín estipulado para unirte en matrimonio, tu boda debe ser una fiesta donde quepan todos los sueños que siempre has imaginado. Te recomendamos que contrates los servicios de los proveedores más adecuados para tu forma de ser, que acudas a un lugar de celebración en plena ciudad o perdido en mitad de la nada, que tires de cóctel largo o de banquete tradicional, que organices la velada bajo techo o al aire libre, y que contrates a un DJ o a una banda que actúe en directo. Nada de eso está reñido con el protocolo de una boda religiosa, así que disfruta de la manera que te haga feliz. ¡Es tu boda!

Si todavía tenéis alguna duda sobre la boda religiosa, ¡no os perdáis este vídeo!

Selecciona a los proveedores que quieres contactar

Lucía Romero Fotografía Fotógrafos bodas
Alejandro Onieva Fotógrafos bodas
Issa Leal Fotógrafos bodas
Kairos Estudio Fotógrafos bodas
Gimena Berenguer photography Fotógrafos bodas
Publicidad

¿No te quieres perder las últimas novedades para tu boda?

Suscríbete a nuestra newsletter

Escribir un comentario

Lista de bodas Zankyou ¡Recibe el 100% de tus regalos en cash!